Miguel Ángel Gómez Ruiz
Contrapunto
Con este gobierno federal, desatinado al por mayor, ni siquiera sus más fervientes aplaudidores comentaron sobre el crecimiento económico que anunció la mañana de este viernes el Inegi, al referir que en 2022 se logró un crecimiento de 3.1 por ciento, apenas superior a lo pronosticado.
Vaya, con un gobierno que dejó de 2018 a la fecha alrededor de 5 millones de nuevos pobres, nula inversión pública en carreteras, un endeudamiento mayúsculo y daño patrimonial de 65 mil millones de pesos en la Cuenta Pública 2021, es difícil aceptar que haya habido algo positivo.
Es entendible que el presidente López no vaya al súper y no tenga idea de la enorme alza de precios en productos de la canasta básica, mucho menos que un alto porcentaje de comerciantes en el país sufran el azote de la extorsión, pero ante eso no hace nada. No se sabe si es porque no le importa o eso le tiene sin cuidado. Vaya, hasta en sus mañaneras la rendición de cuentas –si es que había- desapareció y ahora todo lo que se habla allí son chismes que a muchos nos tienen sin cuidado.
Pero algo es seguro, con altas cifras de desempleo, la enorme pobreza en todo el país y la nula efectividad en sus acciones, el presidente López por fin tiene al país como él lo quiso, sumido en una crisis profunda.
Tesla
Luego que el propio Elon Musk, propietario de Tesla y la red social Twitter, anunciara la instalación de una planta para construir automóviles en Nuevo León, el presidente López dijo no estar de acuerdo en que se implemente en ese estado y todo por la crisis de agua que sufrió meses atrás.
De hecho, su idea –o necedad- es que esa planta pudiera ser puesta en la zona del aeropuerto “Felipe Ángeles”, entre los municipios de Tecámac y Zumpango en donde por cierto, también sufren de abasto de agua.
Surgieron otros interesados, entre ellos la alcaldesa de Veracruz, Paty Lobeira de Yunes, quien mostró su entusiasmo para que esa inversión aterrice en la zona de Bruno Pagliai. También, el presidente municipal de Orizaba, Juan Manuel Diez Francos, comerciante de autos en sus ratos libres, comentó que la empresa automotriz “Stellantis” busca un lugar para establecerse y él ha pugnado para que la empresa llegue a la zona de Orizaba o bien, al puerto. Todo ello ante la ineficacia del gobernador Cuitláhuac García que, hasta el jueves, aún soñaba a Araly Rodríguez, la empresaria que hizo ver a su gobierno como un mundo de juguete.
Hasta el jueves, ya cuando inclusive Paty Lobeira logró una cita con ejecutivos de Tesla, el mandatario –por así decirle- informó que se dialogaría con trabajadores de Tesla para atraer la inversión al estado.
Algo es seguro, de llegar Tesla a Veracruz la inversión no caería en el puerto, sino que el gobierno trataría de llevarlo a un municipio gobernado por Morena, no olvidemos que ya estamos en tiempos de campaña y el próximo año habrá elecciones.
Sin embargo, especialistas en economía en la Ciudad de México advierten que ante el empecinamiento del presidente López de llevar esa empresa a donde le dé la gana, el millonario Elon Musk podría llevar su inversión a otro país o bien, al sur de Estados Unidos y el país de López se quedaría sin nada.
Desacato de magistrados
Luego que los diputados locales de Morena, Verde Ecologista y del Trabajo decidieron crear el bodrio llamado “Tribunal de Justicia Administrativa del Estado de Veracruz (Trijaev) para suplir al Tribunal Estatal de Justicia Administratal de Veracruz (Tejav), la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) atendió la controversia constitucional que promovieron cuatro magistrados del anterior organismo –ahora sólo queda uno- y ordenó suspender las actividades del nuevo tribunal hasta que se determine si su creación fue legal.
El tema es que ante el Tejav había una serie de denuncias sobre la mala administración del gobierno estatal y distintos organismos y poderes, de ahí que los diputados –obedientes y dóciles- decidieron desaparecerlo para colocar un nuevo organismo y con magistrados afines a Morena para hacer de las suyas.
Hace apenas dos días y pese a que tenían prohibido realizar acción alguna ante la suspensión, los nuevos magistrados –los morenistas- repartieron expedientes e hicieron un embrollo, desacatando lo dispuesto por los ministros de la SCJN.
Como seguramente lo ignoran debido a que muchos que ocupan cargos no tienen idea de lo que hacen, la SCJN ante un desacato actúa así: a quien desobedezca se le multa, despide, encarcela e inhabilita. Así de simple, de manera que aquí les doy a conocer los nombres de los seis magistrados (as) que serían sancionados si deciden seguir incumpliendo el mandato del máximo tribunal del país: Leticia Aguilar, Rosalba García Salazar, Diana Aróstegui Carballo, Rubén Hernández Mendiola, Jaziel Cabrera Pacheco y Roberto Sigala Aguilar.
Sería un fracaso más para toda la estructura morenista en Veracruz, a quien convirtieron de 2018 a la fecha en el segundo estado más pobre del país.