José Luis Enríquez Ambell
Café de Mañana
Las y los interesados podrán acceder a esta oferta laboral integrada al IMSS Bienestar como nuevo órgano público descentralizado, por lo que no será necesario que renuncien a su «jubilación o pausarla”, según se sabe.
Al parecer las vacantes consistirán en brindar consulta externa o tomar cargos normativos en la dirección de hospitales y unidades de primer nivel del nuevo modelo de salud, según se entiende por lo que ha dicho el Presidente de México, Don Andrés Manuel López Obrador, y el Director General del IMSS, Zoé Robledo.
En ese sentido se habla de una nueva convocatoria dirigida a poco más de 27 mil jubiladas y jubilados del IMSS con la llegada de la primavera, el próximo día 21 de marzo. Y el proyecto parece interesante y mucho mejor que andar trayendo médicos de otros países habiendo calidad y calidez en nuestro universo.
Vale la pena revisar algunos factores, pues la mayoría de los médicos que se retiran del IMSS, se encuentran en una edad productiva y de experiencia, con la posibilidad de sumarse a este gran esfuerzo que se convoca todo vez que principalmente está dirigida a Médicos Especialistas. Además, considero que el incentivo de conservar su pensión pudiera motivar el interés en seguir sirviendo a nuestro gran país.
Por otro lado, pienso que el medico quirúrgico jubilado difícilmente puede regresar a laborar en dicha área toda vez que las capacidades fisicas -más no mentales-, se encuentran evidentemente mermadas en cierta etapa ya de retiro.
Situacion que puede ser inversa si se trata de un médico clínico, quien aún jubilado puede ser factor de cambio y convertirse en un gran aliado, sobre todo por su experiencia y buen quehacer medico en lo general.
«Cabe reflexionar en tres arterias en el cuerpo de médicos jubilados para el servicio activo”.
1) La deficiente organizacion para preparar especialistas ante el déficit actual que supera los 10 mil en el organismo encargado de la selección y preparación de los aspirantes a nivel nacional; 2) La inoportuna opción de contratar y trasladar médicos de otros países a México para laborar aquí, sin tomar en cuenta que para su ingreso se deben cumplir una serie de exámenes, estudios y filtros que generalmente se realizan y no contratar personal con una formación en otros planes de estudios totalmente diferentes y hasta con otro tipo de doctrinas e ideologías; y 3) Un asunto no menor, desafortunadamente y debido a presiones de varios tipos, la gran mayoría de los recién egresados ya no desean participar para ingresar a los campos clínicos a su disposición en la Red Nacional de Salud y genera déficit humano, casi insuperable.
En síntesis, no se puede generalizar, pero existe en algunos médicos de la comunidad jubilada -mujeres y hombres- el deseo de servir y otros no. Existe la eficiencia profesional en algunos y en otros quizá no. Existe en algunos más la seguridad económica, en otros no. Y también existe en unos la posibilidad física de realizar su labor en otros no. Y todo eso lleva a que haya arterias de posibilidades y otras que no. Incluso, con respeto debemos aceptar que hay algunos médicos con edad avanzada,
enfermos, sin deseos, pero pobres y necesitados, y que también merecen ser atendidos.
Y esas variables serán factor a jugar en las vertientes, pues no debemos dudar que toda la comunidad médica jubilada tiene mística para el servicio con responsabilidad humana y mucho respeto a instituciones de salud como lo es el IMSS y que les necesita, como todo México.
UN CAFÉ CON DOBLE CARGA
Me parece innecesario que el sector salud de México continúe contratando médicos especialistas cubanos.
DE SOBREMESA
Todo buen médico mexicano, siempre puede colaborar perfectamente en el universo objetivo del sector salud, pero requiere al menos de las herramientas básicas para cumplir y del mismo modo ser remunerado.
¡ ES CUANTO !
enriquezambell@gmail.com