José Luis Enríquez Ambell
Café de Mañana
En nuestro sistema parlamentario -sean diputados locales y federales así como, senadores de la república- no resulta ni es extraño que se den circunstancias a las que se refiere el llamado «parar el reloj legislativo”.
Esa circunstancia -válida aunque no les guste o parezca a algunos- es tiempo, y en el que mágicamente se detiene todo el aparato legislativo en reuniones como de sesiones y que se utiliza cuando no se llega al acuerdo que se esperaba y el plazo se viene encima.
El suspender la sesión sin levantarla, hace que las bitácoras legislativas y la votación no sean con fecha del día real sino con la fecha en la que se suspendió el reloj. Y este recurso parlamentario, es útil y les sirve para justificar el no poder llegar a los plazos marcados en la Constitución. Dicho de otra forma, es una circunstancia válida y legal, guste o no esa forma de actuación.
Es por ello que, la votación que no logra concluir antes de las 24:00 horas del día de la sesión que se trate, hace posible que la sesión continue de nuevo por la madrugada del día siguiente, de ahí que el reloj legislativo se convierte en un instrumento jurídico y legal del que se echa mano y es como, avanzan quienes tienen el sartén por el mango en el filo del calendario ordinario.
De ese modo y forma es como en el medio legislativo y parlamentario una sesión ordinaria -como hemos visto ahora en el Senado de la República- dura más de 24 horas. Y han existido ocasiones que dura días.
Estas históricas circunstancias del Reloj Legislativo – a decir de parlamentarios de carrera- muestra cómo se toma en serio la teoría de la relatividad (Albert Einstein) del tiempo.
Y es que no debe sorprender hoy lo que se ha visto sucede en el Senado de la República -ya ha sucedido y seguirá sucediendo en lo federal y los estados- ya que estos alcances parlamentarios del debate, combate y aprobación de temas de interés de unos y otros grupos es por ahora historia de nunca acabar.
El Presidente de México, Don Andrés Manuel López Obrador, en su mañanera de ayer dijo que el reloj legislativo se puede detener mientras tengan tomada la tribuna del Senado. Y de inmediato el Senador Monreal aseguró que la palabra del Presidente es muy fuerte dentro de su bancada y se dijo respetuoso de las opiniones del primer Mandatario.
Así que acto seguido, se activó el Reloj Legislativo para solucionar el conflicto a través de una sede alterna e ir abatiendo les presionase el 30 de abril.
Todos los legisladores llevan un niño dentro, aunque grande y maduro en lo parlamentario.
UN CAFÉ CON DOBLE CARGA
Las sesiones abiertas, cerradas o hasta en lo obscuro en el universo de nuestros diputados y senadores en su conjunto en México, seguirán existiendo, no hay de que sorprenderse.
DE SOBREMESA
Los vaivenes parlamentarios incluye el diálogo y los acuerdos siempre, sea en materia legislativa como política.
UN CAFÉ PARA LLEVAR
Este fin de semana de puente que hoy inicia, seguirá siendo noticia Veracruz con diversos temas de la agenda local y nacional.
¡ ES CUANTO !
enriquezambell@gmail.com