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Un perrito calcinado fue el saldo del incendio provocado por drogadictos en una choza localizada en la reserva del fraccionamiento Zipor, en la ciudad de Xalapa.
La muerte del can es un delito grave que se castiga con cárcel.
Vecinos piden la urgente intervención de las autoridades, pues no es la primera vez que indigentes prenden fuego en viviendas de madera, con riesgo de provocar un incendio forestal o una tragedia mayor.
La tarde del viernes llegaron cuerpos de emergencia a sofocar el fuego que amenazaba con extenderse entre la maleza y zona arbolada poniendo en riesgo a los vecinos.
La humareda y llamaradas se alcanzaban a ver desde las viviendas de Zipor; fueron los propios vecinos quienes reportaron el siniestro y además se solidarizaron con el señor Andrés, quien es la persona que resultó afectada por la muerte de su perrito que estaba dentro de la casa siniestrada y por la perdidas materiales.
Don Andrés como comúnmente se le conoce, es muy apreciado por los vecinos, pastorea vacas en la zona y vende leche, es su principal fuente de ingresos, y comenta que frecuentemente sufre amenazas y ataques verbales de las citadas personas, una pareja del mismo sexo, quienes sorpresivamente llegaron a vivir al área verde hace aproximadamente dos años.
La gente del lugar también se siente intimidada porque siempre salen a pedir dinero y comida y cuando no les dan, son ofensivos e intimidan a amas de casa.
Además representan peligro para jóvenes estudiantes de la UV, Instituto Tecnológico, Colegio de Bachilleres y quienes frecuentan el parque en sus horas libres o momentos de espercimiento. Urge intervención de las autoridades.