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    Felipe de Jesús Fernández Basilio
    Desde A Janela

    “Ya solo restan un año, tres meses y veintiocho días para que se vaya a … su rancho”

    Ahora que nos encontramos prácticamente a un año de las próximas elecciones federales, es necesario comenzar a hacer una profunda reflexión sobre si valió o no la pena el haber elegido hace cinco años al gobierno que está en turno y también para saber si es conveniente o no refrendarlo.


    Se ha escrito mucho, incluidas estas líneas, que el gobierno de la mal llamada 4t ha sido un rotundo fracaso y sí, si lo vemos desde la perspectiva de la ciudadanía que en su momento y aún más lo es si atendemos al interés de México como nación.
    Sin embargo, si lo vemos desde el punto de vista de quienes se han beneficiado del poder, desde el presidente de la república hasta los ayudantes de los funcionarios locales, la situación es completamente diferente; ya que ellos con sobrada razón van a decir que vamos de maravilla.
    Y muestra de esto último, es la prepotencia y el cinismo con el que se conducen Andrés Manuel, Ana Gabriela, Claudia, Layda, Rocío, Cuitláhuac, Manuel, Paco Ignacio y tantas otras “distinguidas personas” que se empoderaron en 2018, (estoy seguro que ustedes, amables lectores, conocen a muchas más aparte de los mencionados).
    Y es que, estas personas tienen y/o son parte de un poder casi absoluto que los llevó a un éxtasis de invencibilidad, riqueza e incluso superioridad moral; no solo con respecto a sus opositores, sino que también hacia los mismos votantes que los eligieron, pero que no son parte del grupo en el poder.
    Siendo esa “borrachera” la causante de que los gobernantes actuales se hayan divorciado de la mayor parte de los ciudadanos que en 2018 los llevaron al poder; porque, ¿Cómo explicar que la directora de la Conade se burle de las deportistas a las que debe de apoyar o que la gobernadora de Campeche sea una vulgar violentadora de género o también, que la Jefe de Gobierno de la Ciudad de México dicte conferencias magistrales sobre buena administración por todo el país, cuando la ciudad que gobierna, literalmente, se le cae a pedazos?
    Del presidente de la república, quien es el comandante supremo de las fuerzas armadas y el máximo responsable de la seguridad interior del país y que, pese a tener constitucionalmente esas facultades, como si nada reconoce haber negociado con las mafias criminales y gracias a eso, solo quienes se identifican como de su administración, pueden transitar libremente por un país que el Estado dejó de controlar; ya ni la pena merece hacer algún comentario, puesto que él cotidianamente es autor de miles y miles de mentiras.
    Una muestra de ello es que, al asumir el cargo, López dijo que en seis meses iba a pacificar el país o de lo contrario su movimiento fracasaría y seguramente, desde antes de tomar posesión negoció impunidad y ventajas para los criminales, a cambio de que le permitieran a él y a los suyos moverse por el país; pero ese acuerdo no aplica para el mexicano común, ya que hasta en las cifras del propio gobierno, este ya es el sexenio con más víctimas fatales del crimen organizado y eso, según el dicho del presidente, significa que su movimiento fracasó rotundamente; ya que no solamente no pacificó al país en seis meses, sino que en casi cinco años que lleva al frente del gobierno, la violencia se incrementó a niveles nunca antes vistos para el mexicano común.
    Así que, aunque los que hoy gobiernan a la mayoría de los mexicanos piensan que el país está de maravilla, porque ellos en lo personal viven de esa manera; la realidad es que el ciudadano promedio, quien es ajeno a esas prebendas producto de la corrupción y de la claudicación ante el crimen organizado, lleva una vida más complicada que la que llevaba antes del 2018, porque a diferencia de los que están en el gobierno, vive con mayor inseguridad y con más pobreza.
    Y estas situaciones nos deben de llevar a hacer una reflexión que nos lleve a reconocer el rotundo fracaso de un gobierno que fue electo con muchísimo poder y, en consecuencia, el año que entra votar por la alternancia en el ejecutivo y por la diversidad en el legislativo.

    felfebas@gmail.com
    Twitter: @FelipeFBasilio