Enrique Yasser Pompeyo
Mesa de Redacción
Las agresiones de las llamadas fuerzas de seguridad contra los periodistas son constantes en el estado de Veracruz, así como en todo el país.
Este martes se registró un caso más, ahora en Puente Nacional. De acuerdo con la información, el reportero Édgar Montes cubría un operativo que se implementó por parte de elementos de la Fuerza Civil para intentar detener a sujetos armados que asaltaron un camión de carga.
Por ese hecho, por realizar la cobertura informativa, el reportero fue ¡esposado! y amenazado. El pretexto: supuestamente no respetó el acordonamiento que, cabe precisar, no había cuando llegó al lugar de los hechos.
Las unidades que participaron en el operativo fueron: FC-2699, FC-2814, FC-2817 y FC-3531. También había patrullas de adscripciones de Úrsulo Galván, Cardel, San Pancho y unidades de C5.
Si algo le sucede al reportero, si alguien atenta contra su vida, ya se sabría quienes fueron.
El tema es una llamada de alerta a las autoridades, a Derechos Humanos y a los organismos nacionales e internacionales en la materia, pues no se debe olvidar que Veracruz es el estado más peligroso para ejercer el periodismo.
El hecho también muestra y confirma el abuso de autoridad, el abuso de poder y la violación permanente a los derechos humanos por parte de los elementos de las diferentes corporaciones de seguridad.
De acuerdo con la Comisión Estatal para la Atención y Protección de los Periodistas (CEAPP), durante los primeros 6 meses de 2023, atendió 357 reportes de intervención, de los cuales, 74 fueron agresiones reportadas, lo que representa el 20.73 por ciento.
Al respecto, el ente autónomo detalla que las agresiones reportadas por zonas se distribuyen de la siguiente manera: 32 por ciento en la zona norte; 30 por ciento en la zona centro; y 38 por ciento en la zona sur.
En ese contexto, cabe recordar que tanto el presidente Andrés Manuel López Obrador como el gobernador Cuitláhuac García Jiménez hacen constantes acusaciones y señalamientos contra los representantes de los medios de comunicación por informar y por cuestionarlos, lo que abona a la violencia contra la prensa.
El caso del reportero Édgar Montes, como el de los demás representantes de los medios de comunicación en Veracruz no deben quedar en la impunidad; desafortunadamente la Fiscalía y las demás autoridades responsables son omisas, opacas y hasta incurren en omisión.
enriquepompeyo@hotmail.com