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    Alejandro Bustos
    Sinapsis

    En el escenario político actual, la oposición debería ser la voz crítica y la alternativa a las decisiones del gobierno; sin embargo, en tiempos de crisis como el desastre provocado por el huracán Otis que devastó Guerrero, la oposición parece centrarse más en palabras vacías que en acciones concretas.

    El pasado lunes, la senadora Xóchitl Gálvez, virtual candidata presidencial del Frente Amplio por México, no perdió el tiempo en ofrecer su ayuda al presidente López Obrador tras la tragedia en Guerrero. Su pregunta retórica, «Presidente, ¿cómo le ayudo en Guerrero?», bien podría ser un ejemplo de su buena disposición pero, lamentablemente, se queda sólo en buenas intenciones porque ella sabe, de antemano, que no iba a tener una respuesta de concordia por parte del titular del poder ejecutivo.

    Gálvez enfatizó la importancia de la unidad en tiempos de desastre, lo cual es cierto y una característica inherente de nosotros los mexicanos; no obstante, algunos criticaron que sus palabras deberían reflejarse en acciones concretas para brindar ayuda a quienes más lo necesitan, al mismo tiempo que dirija un ataque frontal al Gobierno Federal destacando su ineptitud.

    La primera parte parece que sí fue escuchada. El día de ayer, la senadora presentó una iniciativa de ley para destinar 50 mil millones de pesos a la reconstrucción en Guerrero debido a los efectos del huracán Otis. La propuesta busca reducir el IEPS en la gasolina, permitir que las Mipymes deduzcan el 100% de contribuciones por salarios, evitar la suspensión del servicio de energía eléctrica por parte de la CFE a los afectados, otorgar prórrogas y condonar intereses en créditos a la vivienda. Gálvez, incluso, invitó de buena fe a diputados de Morena y aliados a apoyar la iniciativa. Además, cuestionó la propuesta de AMLO de recortar fondos al Poder Judicial y sugirió utilizar recursos de la Secretaría de Energía o aumentar el precio del petróleo. Hasta ahí, todo bien, pero se queda corta al momento de atacar al presidente.

    Y es que en general me parece que la respuesta de la oposición al manejo de la crisis por parte del gobierno de AMLO, especialmente en el contexto de la baja en la aprobación presidencial, debería ser más contundente y confortativa. Algunas de las encuestas -como las publicadas el día de ayer en El Financiero y en Politico.mx- muestran que la aprobación del presidente está disminuyendo, lo que indica un descontento general de la población; sin embargo, la oposición no logra traducir esta insatisfacción ciudadana en medidas concretas que abonen al crecimiento de su plataforma política.

    Mientras que el FAM le apuesta a la pasividad, la ciudadanía decepcionada con Morena espera soluciones reales y una alternativa atractiva que nomás no llega; sobre todo, el electorado indeciso que es a quien realmente tienen que convencer. Y es que, por tercera semana consecutiva, Xóchitl no levanta cabeza. Ayer nos despertamos con las malas noticias de que las encuestas la siguen colocando 20 puntos por debajo de su principal competidora, Claudia Sheinbaum.

    Xóchitl Gálvez, como cabeza de la oposición, tiene la responsabilidad de ir más allá de las palabras amables, así como de demostrar su compromiso con el crecimiento del país; por lo que tendría que estar envuelta en la bandera del antimorenismo, en vez de verla proponiendo un discurso políticamente correcto que, al final de día, no lleva a ningún lugar. De hecho, su eslogan debería ser: “Morena = a retroceso”.

    El Gobierno Federal se ha visto claramente rebasado para dar una respuesta rápida a los damnificados de Guerrero y me da la impresión de que la oposición no se lo está sabiendo transmitir a la ciudadanía. Siguen hablándole a su propio sector electoral cautivo y a sus seguidores, lo que evita que salgan de esa ‘Cámara de Eco’ de la cual ya he hablado en otras ocasiones en este mismo espacio.

    La confrontación efectiva y la rendición de cuentas son esenciales para el funcionamiento de una democracia saludable; máxime, en una como la nuestra que está en grave peligro de extinción ante la amenaza de seis años más de Morena.

    Una verdadera oposición no debería quedarse estancada sólo en palabras bonitas y buenos deseos, sino en promover la acción política ciudadana que inspire y motive a un gran movimiento por el cambio.

    Y mucho me temo que en el FAM, de momento, siguen extraviados.

    Fuente:
    “Buen día para Sheinbaum: Encuestas dan ‘ventajota’ sobre Xóchitl, Samuel y Ebrard para 2024”
    https://politico.mx/buen-dia-para-sheinbaum-encuestas-dan-ventajota-sobre-xochitl-samuel-y-ebrard-para-2024
    “Baja aprobación de AMLO en octubre, divide opiniones atención por huracán Otis: El Financiero”
    https://politico.mx/baja-aprobacion-de-amlo-en-octubre-divide-opiniones-atencion-por-huracan-otis-el-financiero
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