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    Miguel Valera
    Contraseñas

    La movilidad urbana ha representado un reto para los gobiernos de los últimos años en Xalapa. Además, seguimos siendo paso obligado para quienes viajan del sur hacia el altiplano, sobre todo por el alto costo que representan las casetas del libramiento. Considero que la construcción de dos pasos superiores vehiculares, uno en Las Trancas y otro en la zona de la Plaza Urban Center, no ha estado mal.

    Sé que hay un movimiento mundial para detener el uso del vehículo, pero también no hay que negar que esta tendencia, sobre todo en América Latina, lucha contra el deseo de nuestra clase media de aspirar al uso del automóvil como un logro de progreso y bienestar. Recuerdo que en 2014, a iniciativa del entonces presidente municipal de Xalapa, Américo Zúñiga Martínez, un grupo de arquitectos del despacho danés Gehl Architects estuvo en esta ciudad para evaluar el problema, con la idea de rescatar espacios para el peatón.

    Este programa formaba parte de la Iniciativa de Ciudades Emergentes y Sostenibles (ICES) promovida por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), con quién Américo Zúñiga estableció una alianza estratégica. Por cierto, esta institución nacional fue la misma que dejó 8 millones de dólares —unos 150 millones de pesos— para que Xalapa tuviera un biodigestor para el manejo de los residuos sólidos y pudiera ampliar la vida útil del relleno sanitario—, recursos que el indolente de Hipólito Rodríguez Herrero, dejó perder.

    Pero bueno, esa es otra historia. Regresando a la movilidad, con las propuestas del despacho danés se lograron hacer intervenciones en el centro histórico, colocar árboles que por cierto ahora están floreando y ganar espacios a los peatones y mejorar la movilidad vehicular. Han pasado muchos años de este hecho y los retos de la movilidad en la capital se han acentuado. Por eso insisto, la construcción de esos puentes en Lázaro Cárdenas ha sido un hecho positivo del gobierno de Cuitláhuac García Jiménez.

    El sábado pasado se abrió a la circulación este segundo puente que llevará el nombre de “Heberto Castillo”, en honor al gran ingeniero norveracruzano. Estuvieron presentes el Secretario de Infraestructura, Elio Hernández Gutiérrez y el empresario Adán Mancilla Avendaño, Gerente de la empresa Construcciones y Desarrollo MACON SA de CV. Los automovilistas hicieron sonar su claxon en señal de regocijo cuando empezaron a cruzar el puente.
    Ciudadanos, presentes en el recorrido que autoridades y empresarios realizaron, agradecieron al gobernador Cuitláhuac García Jiménez esta obra. Con pancartas en manos, señalaron: “Los ciudadanos le damos las ¡GRACIAS”; “Gracias Gobernador por la obra del Puente”; “Los xalapeños le damos las gracias por la construcción del puente”; “Señor Gobernador, su palabra se cumplió con la construcción del puente”; “Excelente obra; gracias señor gobernador”.

    En esta obra se invirtieron unos 129 millones de pesos y consta de 431 metros de longitud y 10 claros. Cuenta con cuatro carriles en la parte superior y dos para cada lado a nivel de piso, con dos entronques o retornos. Además y eso hay que destacarlo, en la parte de abajo hay espacios para los peatones: jardines, áreas de descanso, mesas y hasta juegos infantiles, lo que habla del compromiso con este binomio automovilistas-peatones.

    Aunque sé que hay muchos radicalismos en nuestra sociedad y en este tema de la movilidad —algunos le apuestan sólo a la movilidad peatonal y otros a la preeminencia del vehículo automotor— yo, como el viejo Aristóteles, prefiero el justo medio, porque al final el vehículo es necesario para la movilidad, es parte del progreso de nuestra sociedad, pero también se debe regular su uso, en pro del cuidado del medio ambiente. Total, amable lector, se acabó el tráfico desquiciante en esta zona de Xalapa y que este puente sea por el bien de todos.

    TIPS


    ¿De qué hablarían el ex secretario de gobierno de Javier Duarte de Ochoa, Erick Lagos Hernández y el flamante director del Instituto Veracruzano de Desarrollo Municipal (INVEDEM) en el gobierno morenista de Veracruz, Rafael Alejandro Castillo Zugasti, quienes muy discretos, pero muy sonrientes, compartieron el pan y la sal hace unos días en el restaurante Vadiro’s de la calle Miguel Hidalgo 94 en Xalapa? Algo traen entre manos estos inquietos personajes de la política veracruzana.


    Nos reportan que será este martes cuando se haga pública la salida de Jorge Miguel Uscanga Villalba de la Subsecretaría de Educación Media, Superior y Superior.

    Por cierto, en el mar de irregularidades que se han venido ventilando, como el caso de una pléyade de aviadores en diversas instituciones, como la Escuela de Bachilleres “Antonio María de Rivera”, al buzón de este reportero llegó una denuncia que muestra que la directora de la Gaceta del Estado, Joyce Díaz Ordaz Castro, estaría en esa situación en el centro educativo mencionado. Su esposo, nos dicen, fue colaborador de Uscanga Villalba y le dio un “empujoncito” para que disfrutara de un espacio en ese centro educativo.

    @MValeraH