Veracruz
Dejando de lado su principal bandera de defender a las mujeres de todo tipo de agresión y violencia, la colectiva Brujas del Mar -liderada por Arussi Unda e integrada por operadoras del Clan Yunes y del equipo de campaña de Pepe Yunes- se han sumado a la campaña de odio y de desprestigio en contra de la candidata de Morena, Rocío Nahle García, a través de una serie de ataques en sus redes sociales y pronunciamientos públicos.
De la marcha realizada en Xalapa a favor de Rocío Nahle por la violencia política en razón de género de la cual es víctima, la colectiva emprendió toda una maquinaria de ataques en contra de la morenista a través de sus cuentas oficiales de las redes sociales para minimizar la manifestación.
De hecho, este miércoles ofrecieron conferencia de prensa para desconocer a una de sus integrantes, pero en ningún momento reconocen que son operadoras de la campaña de Pepe Yunes, como Mónica Mendoza, quien forma parte del equipo cercano del priísta desde hace años como una de sus estrategas políticas y quien en esta era de la 4T cobró tres años como titular del Centro de Estudios para la Igualdad de Género y Derechos Humanos del Congreso local.
Del mismo modo estuvo presente Sabrina Zárate, ex priísta, quien pese a ser esposa del exdirector del DIF de Boca del Río e integrante de los “Ladrones de elecciones” grupo liderado por el ex alcalde priísta, Salvador Manzur, Carlos Robles Saldaña, quien fue pieza clave en la campaña del morenista Ricardo Exsome Zapata, también se sumó a la campaña de desprestigio en contra de Nahle García, a quien previamente había criticado en sus redes sociales y en este periodo electoral pretendía ser candidata a diputada federal por el distrito 12 de Boca del Río por el Partido Verde y así representar a la alianza morenista “Sigamos haciendo historia en Veracruz” cargo que no logró pues se escudó en una falsa militancia.
Sabrina Zárate formó parte del gobierno de Fidel Herrera Beltrán, primero en una tortuosa y penosa jefatura de la Oficina de Hacienda en el puerto de Veracruz, cargo en el que duró una sola semana y fue corrida por la exprimera dama, Rosa Herrera Borunda por razones tristemente públicas, reincorporándose un año después en un muy muy muy bajo perfil como encargada de Coverexport, oficina dependiente de la extinta Comisión Estatal de Comercialización Agropecuaria (Coveca).
Lo anterior deja en entredicho la causa que dicen defender las integrantes de la organización Brujas del Mar, quienes por un lado reclaman más espacios públicos para las mujeres y por otro lado, ponen el pie y lastiman a la mujer que desea gobernar por primera vez en Veracruz.
De forma despectiva y discriminatoria, a través de las redes sociales, las Brujas del Mar se refieren a Rocío Nahle como la “zacatecana” pretendiendo denostar su origen, con la finalidad de intentar reducir la preferencia electoral hacia ella.
Con ello la colectiva Brujas del Mar se ha sumado a la campaña de odio en contra de Rocío Nahle en un estado que ocupa los primeros lugares en feminicidio y donde ya hay dos alertas de violencia de género.
En las publicaciones de las Brujas del Mar se leen posicionamientos donde exigen que hombres no roben los espacios de cargos públicos a mujeres, pero en Veracruz denostan y atacan a una mujer.
Incluso la señalan y la acusan de corrupción, tráfico de influencias y de enriquecimiento ilícito, a pesar de que deben ser las instancias correspondientes las que deberán investigar y determinar su probable responsabilidad de los hechos que se le señalan.