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    Inocencio Yáñez Vicencio

    Bien dice Weber, que el político, para serlo, entre otras cosas, debe posser pulso político, cosa que se trae o no lo adquirir nunca, porque eso no se aprende en ninguna univerdidad. Lo que no dice él, pero si la lógica, es que tiene matices, es decir, unos tienen poco, otros mucho, pero no creo que la oprobiosa conducta de Alito, se deba a que no tiene el pulso que le permita ver que nadie que no sea beneficiario de su siniestro plan contra el PRI, le aprueba tamaña traición.

    Alito forma parte del grupo del sureste, que siempre apoyó a Andrés Manuel López Obrador.  Circulan fotos de su cercanía con Amlo, siendo gobernador priista. Los ataques que recibió de Laida Sansores, fue parte de un juego para simular distancia de Morena. La realidad es que el Presidente López Obrador, lo impulsó a la presidencia del tricolor, para utilizar este partido para sus trácalas y acabar con él.  A todos los gobernadores les dio a escoger: o sometimiento o persecución. 

    Desde su campaña para la presidencia del CEN del PRI,  se propuso deshacerse de sus rivales con infamias contra José Narro, ex rector de la UNAM y contra Ivón Ortega, exgobernadora, inventando a Lorena Piñón, como contrincante, con el único mérito lo tenía en el PAN. No paró ahi. La ampliación de su mandato la hizo pasando sobre la militancia y provocando la saida de importantes activos. 

    Habiendo dejado la candidatura presidencial al PAN, a cambio de que los blanquiazules  le apoyaran en el estado de México, una vez que los números dicen que éstos no hicieron su parte, a tal grado de que la votación de los panuchos fue casi la misma que obtuvo el Verde, no protestó, prefiriendo ver los traidores por otro lado.

    Nada dijo que se interrumpiera el proceso para sacar a la candidata de la Coalición Opositora, que terminó con la imposición de Claudio X. González, hacia una Xochitl, que fue una candidata ultraderechista, a modo para hacer lucir a la candidata de Morena .

    En la espuria Asamblea para aprobar la reelección, como vil porro, denunció que afuera estaban los cómplices del asesinato de Colosio, denuncia que debe ratificar ante autoridades competentes, de lo contrario confirmará que es un vil cobarde criminal, porque imputa cargos a correligionarios inocentes. Olvida que Zedillo puso la Procuraduria en manos de la oposición para esclarecer este lamentable hecho. Fui compañero de Ernesto dos años en la Vocacional 5 y cinco años en la Escuela Superior de Economía del IPN y puedo dar testimonio de que fue el primer antpriista que llegó a la Presidencia.  Su sana distancia y sus cuadros que hoy colaboran con Morena no son pura letra. Su ruptura con Salinas tiene hondas raíces. Si hubiera podido incrminarlo, lo hubiera hecho. No tengo la menor duda que el más agraviado con la muerte de Colosio, fue el PRI.

    Es tan ignorante que desconoce o tan perverso que finge desconocer que el  FOBAPROA fue obra de los banqueros que se autoprestaron, no del gobierno, que hizo mal, si , en absorber esos pasivos, pero eso no lo hace ladrón.  Nada dice que hoy mismo Mario Di Constanzo, escribe que la deuda de Amlo, equivale a 7 FOBAPROAS.

    Alito ha construido una Sátrapía al interior del PRI, para poder servirle mejor al autócrata que nos gobierna, esa es la realidad.  No es falta de sensibilidad. Si así fuera bastaría con que hoy viera como todos los medios hacen escarnio de su persona. No , porque lo que está haciendo no es cuestión de sensiblidad, es parte de la enconienda presidencial y como lo único que le importa es salvar su pellejo, pues no hace otra cosa que destruir a » su» partido.

    Si Dante, que carga sobre sus espaldas uno de los escándalos más grandes de corrupción, ha podido sobrevir, es porque se cubre bajo las enaguas de Amlo y Morena, pero Alito, no irá muy lejos, porque no tiene base propia, pronto sólo le quedará su logo.

    Así como Porfirio Diaz, levantó la bandera del Sufragio Efectivo. No Releccion. Y luego la pisoteó.  Obregón la violentó.  Hoy , Alito, la sepulta y con ello sentencia a muerte al PRI. 

    Quienes aprobaron las reformas para permitir la reelección en el PRI, como quienes con su silencio  la secundan, meeecen todo el desprecio y repudio de quienes creemos que sin buenos partidos no hay democracia.

    Es saludable que un pais necesitado de que por lo menos haya circulación de sus élites y de oxigenar su clase política, suprima la reelección, pero será incompleta si no se obliga a los partidos a que también la supriman y establezcan elecciones primarias para renovar sus dirigencia.  La falta de regular las instituciones mediadoras entre la sociedad y el Estado y sobre todo aquellas que promueven inicitativas de ley, han reintroducido el voto imperativo y dependen actualmente de los recursos públicos , nos han llevado a la partitocracia, que urge atajar. 

    Fue inconcebible ver una manada ayer aplaudiendo que un partido que en sus documentos se declara socialdemócrata, ahora proclame su alejamiento del neoliberalismo.  En verdad, los jumentos de Alito,  no se dieron cuenta que es un contrasentido. Un partido socialdemócrata no puede ser neoliberal. Los socialistas españoles privatización para no ser aislados de Europa, no porque fueran neoliberales.  En sus estertores todo es posible. 

    Por cierto estos bufones de Amlo, no deben cantar Victoria, porque la impugnación hará que en tanto el TEPJF no resuelva,  sigan en vigor los pasados estatutos y con ellos no podrá reelegirse Alito, al menos que Amlo, les ordene que ya se pronuncien, pero por ahí puede saltar un magistrado, que no acate la orden de los cómplices de la Presidencia y se les puede aguar la fiesta al hampa de Alito.

    Se lo que sea, Alito y su pandilla, al igual que los que hoy guardan silencio ante esta canallada, merecen el total repudio de la sociedad.