Enrique Yasser Pompeyo
Mesa de Redacción
El presidente municipal de Xalapa, Ricardo Ahued Bardahuil es cauto en sus declaraciones.
A pesar de la insistencia de los representantes de los medios de comunicación para que diera su postura sobre el caso del senador Yunes y su reunión con la presidenta electa Claudia Sheinbaum Pardo, el alcalde se mantuvo estoico.
En la entrevista que le realizaron este jueves los reporteros tras el simulacro de sismo, el edil capitalino fue claro al señalar que debe mantenerse observador y respetuoso por varias razones.
De entrada, porque si bien recibió la invitación de la gobernadora electa de Veracruz, Norma Rocío Nahle García para que se incorpore a su administración como secretario de Gobierno, aún es eso, una invitación.
Ahued Bardahuil lo tiene claro. A pesar de la distinción al tomarlo en cuenta, la próxima titular del Ejecutivo estatal deberá ratificarlo en el cargo.
Los posibles futuros secretarios de despacho han acompañado a Nahle García a reuniones y eventos, por lo que bien estarían a prueba para conocer su desempeño y su actuar.
Al final ya se verá quiénes pasan el examen o quiénes podrían quedarse en el camino.
Por eso Ricardo Ahued se mantiene sereno y concentrado en su responsabilidad como alcalde de la capital veracruzana.
El alcalde de Xalapa también evita declarar de más, sobre todo en temas partidistas, porque está consciente de que al llegar a la Secretaría de Gobierno será el encargado de la política interna, por lo que deberá dialogar con todas las fuerzas políticas y sectores.
Más allá de filias y fobias, la próxima administración estatal requiere de interlocutores para tender puentes de comunicación con todos, incluida la oposición y otros grupos.
Ahued se caracteriza por su apertura al diálogo y en la Secretaría de Gobierno se debe cambiar la imagen que hasta hace unos meses tenía.
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