Inocencio Yáñez Vicencio
El debate sobre la reforma al poder judicial en México, se presenta entre académicos y algunos representantes de partidos opositores, pero el partido que la impulsa y sus comparsas, no presenta una sola línea argumentativa. Para Morena no es asunto de convencer sino de vencer.
La política no se hace en solitario. El dialogo entre uno sólo no existe. El diálogo es entre dos o más y de manera reglada.
Quienes sostenemos que el poder es una relación social, pero no únicamente sabemos que también es importante el engranaje institucional que cada correlación de fuerzas crea, para su dominación, que toda dominación funda aparatos coercitivos pero también aparatos ideológicos e ideologías, porque no basta la fuerza para someter, se necesita de instituciones y formas que recubran las medidas y acciones de los grupos dominantes para que sean aceptadas por los que son sometidos. No son suficientes ejércitos, policias y cárceles para reprimir al infractor de la voluntad de las clases dominantes hecha ley. La burguesía al luchar contra la nobleza feudal, lo hizo para liberar la producción y la distribución de la férula de señorial y absolutista, pero también romper las jaulas que aprisionanaban al siervo, porque el capital, necesitaba mano de obra que tuviera libertad de cambiar de amo y dar con ello origen al mercado laboral, para la acumulación capitalista. Pero también la burguesía y sus fracciones y representantes tuvieron necesidad, para tener la menor resistencia, de un Estado revestido de neutral y que apareciera, no como guardián de una clase sino de todos, para legitimar su obediencia. Más fuerza o más consenso, depende de la resistencia que se tenga. A mayor resistencia , más coerción, a menor resistencia, menor dureza. Cuando el gran capital se siente amenazado por un movimiento revolucionario u obrero, puede hacer uso de un gobierno autoritario o dictatorial. A lo largo de su historia el capitalismo ha promovido ideas en la prensa, las iniversidades, las academias, la cultura… que contribuyen a hacerlo aceptable o por lo menos a que vean las contradicciones del sistema económico de origen externo. No es nuevo que se nos diga que las diferencias económicas entre los pueblos o países se deben a las razas, a la geografía, a la educación, a los malos gobiernos, al subdesarrollo, a la dependencia, a problemas de la modenidad. Los trabajos de John Dewey, nos brida reflexiones bellisimas sobre el papel de la educación, que aún cuando estén impregnadas de fetichismo, tienen mucho de valía. Friedrich A. Hayek, padre del neoliberalismo, promotor de un capitalismo salvaje, que sublima el individualismo y ve en toda intervención y planificación, aniqulimamiento, representa una propuesta que sin compartir, está bien argumentada. Hace casi doce años leí el trabajo de Daron Acemoglu y James A. Robinson: Por qué fracasan los países, que al recibir el Premio Nobel, retomó tanto vuelo que hay quienes sin distinguir entre políticas públicas y Economía Política, la comentan sólo porque pareciera una crítica al mal gobierno de los morenos. Lo primero que puedo decir es que se inscribe entre las reflexiones que los dueños del mundo capitalista promueven para que las causas del atrazo de México y países superexplotados. Sin duda para nosotros es una lectura obligada, en primer término, porque es una respuesta racional sobre las causas de nuestro atraso. Me recordó Los orígenes del atraso, de John H. Coatsworth. Nadie puede negar que es una visión bien sustentada, pero sesgada, porque el origen de nuestros grandes males está , antes que otra cosa, en que nostros competimos cuando las principales transacciones internacionales eran de materias primas y no estaban monopolizadas. Cuando se nos compara con Estados Unidos, se soslaya que su población pivote, venía de un país que prácticamente había dejado el feudalismo y que ni siquiera importó una sola institución señorial y feudal. Los ingleses siempre fueron en ese territorio ingleses, libres. En cambio, el oportunista y perverso de Iturbide, al firmar la independencia dejó intactas las estructuras coloniales y feudales ( atípicas pero feudales).
Los Tigres Asiáticos, despegaron como parte de un cinturón estratégico para detener el avance de los paises comunistas. Costa Rica, podemos decir que siempre ha tenido buenos gobiernos y no es una potencia. La República de Chile, a pesar de que la economía de Pinochet, detuvo dirigidas por Milton Fritman, el otro oráculo del neoliberalismo, la llevó a mayores niveles de desigualdad, que por cierto todavía se rige por la Constitución de la dictadura. Lo real es que los países que llegaron tarde al reparto del mundo, sufren una superexplotación que los hace dependientes del imperialismo. Como bien se ha dicho. Hoy no se necesitan ejércitos, aviones, tropas, cañones para someter a un pueblo. Basta la relación precios, precios que fijan las metrópolis capitalistas, para condenar al atraso a los pueblos que no los fijan. La duda externa de muchos países es impagable, los pueblos apenas pueden cubrir el vencimiento de pagos y cualquier variación en las tasas, los colapsa. La deuda externa es una manguera con la cual los países ricos sustraen la riqueza de sus acreedores. Hace años José Luis Ceceña, documentó como fue surgiendo esa deuda, con préstamos atados, para que los grandes capitales pudieran sacar su sobreproducción.
Los grandes capitales no sólo nos dicen hoy que debemos comer y vestir, también nos dicen qué debemos leer y para que no parezca tan tripulado, unge de Premio Nobel, para revestirlos también de puros e imparciales. No, no mienten respecto a que el libro Por qué fracasan los países, de Daron Acemoglu y James A. Robinson, señale que en el diseño de las instituciones y malos gobiernos, radica el origen del atraso de los países pobres. Malo porque es una verdad a medias. Porque con buenos o malos gobernantes, no vamos a superar el atraso en tanto no rompamos la dependencias económica y cambiemos el sistema basado en la explotación salarial. Porque es bueno querer crecimiento pero mejor querer y luchar porque tengamos desarrollo y para que exista desarrollo no es suficiente el crecimiento, es necesario que tegamos distribución del gasto, pero especialmente, distribución de la riqueza, como lo propone Thomas Piketty. De las universidades norteamericanas también hemos recibido las luces de Paul A. Baran y de Paul M. Sweezy, por mencionar sólo dos brillantes economistas.
Es una lástima que el debate sobre nuestra economía y las constituciones políticas, se reduzca a círculos muy estrechos, porque si en materia económica vemos que hay personas sin ningún pudor, que armados de simple voluntarismo se lanzan al ruedo, en materia política, se desnudan a media calle, porque si bien es cierto que hablar del Constituyente, es hablar de política, hay que conocer su historia y sus efectos jurídicos. Durante los 30 años que impartí mis clases en la Escuela Superior de Economía del IPN, siempre les pedí a mis alumnas que no se presentaran al examen sin estudiar, porque la calificación se recupera pero la vergüenza perdida nunca. Sin embargo en política y – no sólo en política, entre los que escribimos hay una infrafauna, que dan prueba que lo sinvergüenza y lo cínico van de la mano – que si pudieran compraban, como en la Francia del Antiguo Régimen, un título nobiliario. No se preocupen ya con Porfirio Diaz, gobernaron los científicos. Lo que urge son polticos y las cualidades del político, según Max Weber, son la vision, el pulso político, el olfato político, la capacidad para concertar, la sensibilidad, pero no se apuren. Decía el fundador de la sociología comprensiva que las cualidades del político se traen o no se traen, pero que en ninguna universidad se aprenden. Algo que también apuntó el autor de Economía y Sociedad y me parece ausente en los morenistas, es que cuando vayas a una mesa de negociación no lleves principios finalistas, sólo que quieras imponer, no negociar. Cuando se negocia hay que estar dispuesto a dar para recibir. La orden de Amlo, de no cambiarle ni una coma a sus iniciativas, muestra que no hay disposición ya no a la negociación, ni siquiera al dialogo. Cuando Claudia Sheinbaum dice que la Reforma Judicial ya esta consumida, muestra que es ignorante, que no sabe que Montesquieu y desde 1789, una Constitución se compone de la parte orgánica y de derechos individuales reconocidos y protegidos, por lo que alterar sustancialmente estos dos apartados no es función de los poderes constituidos sino del poder Constituyente, por lo que si un poder reformador los cambia, está dando un golpe de Estado. Nosotros no inventamos la Teoría Constitucional. Nosotros la adoptamos como técnica para limitar el poder y por tanto si queremos reformar podemos hacerlo con casi todo el cuerpo doctrinario, pero los apartados orgánicos y de derechos individuales, tendremos que convocar ( competencia de fuerzas revolucionarias y que obliga a quedar en suspenso a los poderles constituidos), a un Congreso especial con diputados especialmente nombrados para producir una nueva Constitución.
Pero no señores. Morena no tiene en su arsenal argumentos. Morena quiere destruir un poder judicial independiente e imparcial, para tener únicamente ministros, magistrados y jueces que condenen a sus opositores y dejen en la impunidad los escándalos de Rocío Nahle, SAGALMEX, Radio Televisión, la familia real…
El actual gobierno de Morena, es resultado de elecciones simuladas y convalidadas con órganos electorales capitaneados por morenistas que no pueden más que llevar a la quiebra moral y material al país, pero que en entidades como Veracruz, Rocío Nahle, secunda con un gobierno de mediocres y cínicos andan buscando bufones que vandan elogios a su travestismo.
La política es una práctica, la política es acción. La política no es cuestión de rótulos, menos de sobadas de lomo. La politica es acción concertada para logros comunes. Morena ni sabe concertar, ni sabe de otra cosa que no sea de acciones y leyes facciosas. Morena trabaja por un poder sin limites , para tapar sus simulaciones y sus sinvergüenzadas y eso aquí y en todas partes se llama dictadura, por eso no saben de debates, saben de componendas y traiciones.