Bernardo Gutiérrez Parra
Desde el Café
La transformación que llevó a cabo Andrés Manuel López Obrador en el país, alcanzó a las mujeres de todos los estratos sociales. ¡Y de qué manera! El tabasqueño se fue dejando un promedio anual de 3 mil mujeres asesinadas en su administración, con lo que estaríamos hablando de 18 mil. Pero…
Debido a la reclasificación que se hizo de esos crímenes sólo 6 mil (en números redondos) fueron reconocidos como feminicidios. Aún con esa “rasurada” México se ubica como el segundo país de Latinoamérica con más feminicidios, solo superado por Brasil.
Uno de los estados que encabeza la lista macabra es Veracruz, a cuyas mujeres les prometieron que no habría “ni un feminicidio más”. Pero el sujeto que hizo esa promesa se irá dejando más de 2 mil.
Al igual que su jefe Andrés Manuel, Cuitláhuac García cerró los ojos ante la multiplicación de feminicidios, se dedicó a soltar frases alegres y falaces (les informo que el número de feminicidios ha bajado un 50 por ciento en nuestra entidad).
Y a descalificar y acusar de amarillistas a los medios que han tenido la mala costumbre de contradecirlo con datos duros.
Pero los feminicidios no sólo no se han podido ocultar, sino que aumentan de forma alarmante para desasosiego de las veracruzanas.
Con el título: “Una furia feminicida recorre Veracruz”, el periodista Héctor de Mauleón da cuenta este jueves de los últimos ataques letales a mujeres ocurridos en la entidad. Como el caso de Marina, una maestra de Orizaba que fue desmembrada en el baño de su casa con dos cuchillos y una motosierra.
De Mauleón califica el hecho como “uno de los casos más dantescos en la siniestra ola de feminicidios que sacude el estado de Veracruz, y que ha arrojado cuatro víctimas solo en las últimas 48 horas”.
De acuerdo con la información que se proporcionó, la conclusión que uno saca es que fue un feminicidio cruento y salvaje; lleno de una sevicia inaudita que va más allá de la más terrible película de horror.
Si como candidato Cuitláhuac sí se fue de la lengua al prometer a las veracruzanas casi el paraíso, como gobernador las abandonó a su suerte.
¿Resultado? Según la Red Nacional de Defensoras de la Paridad en Todo, del 2018 al 2023 fueron asesinadas más de 1,500 mujeres. Y así como van las cosas el número de feminicidios rebasará los 2 mil para cuando Cuitláhuac al fin se largue.
Contra lo que dice el gobernador, tiene años que Veracruz se mueve entre el tercero y quinto lugar como la entidad con más feminicidios, asegura De Mauleón. Pero lo que jamás ha mencionado Cuitláhuac, es que la entidad se encuentra en un inamovible segundo lugar nacional en asesinato de niñas. Y Xalapa, la bella, culta, religiosa, educada y conservadora Xalapa, ocupa el primer lugar estatal en feminicidios desde que llegó la 4T.
Misógino y acomplejado, López Obrador nunca hizo por las mujeres otra cosa que denostarlas, descalificarlas y burlarse de ellas. Desde el púlpito de sus mañaneras llegó a decir que los colectivos feministas estaban manipulados por los conservadores.
“Pero nosotros seguiremos con nuestra misión de transformar al país y la transformación también llegará a las mujeres” dijo en una ocasión y vaya que lo cumplió.
Miles de madres a las que les quitaron las estancias infantiles y las escuelas de tiempo completo de sus hijos, cientos de miles de mujeres que sufren a diario de todo tipo de violencia y las 18 mil asesinadas de manera cruenta en su gobierno (aunque oficialmente “sólo” son 6 mil), pueden avalar que la 4T “transformó” sus vidas, al convertirlas de manera literal, en un infierno.
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