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    Miguel Ángel Gómez Ruiz
    Contrapunto

    Es preocupante que la presidente Claudia Sheinbaum desacate los amparos que han dictado algunos jueces en contra de la reforma judicial y encima, instruya a los senadores y a las cabezas del Instituto Nacional Electoral (INE) a que continúen con la preparación de la elección de jueces y magistrados a realizarse -una parte- en 2025.

    Es obvio que con eso, ella viola la Constitución Política del país y ese es el ejemplo que da a sus gobernados, que no todos, prácticamente dándoles a entender que la desobediencia es el mejor ejemplo para sacar adelante a un país que de por sí, gracias a la izquierda, está en el hoyo.

    Leo comentarios en redes sobre que el expresidente López sigue cerca de la presidente. Hay quien lo cree y hay quien no, lo que creo es que hay un contacto diario entre la presidente y él y eso no va a cambiar. Por eso es que ella tiene a funcionarios que colaboraron con él y ahora no es que esté vigilada por ellos, pero se denota que hasta en eso intervino el exmandatario, él quiere o bien, está en control de las cosas.

    Por su parte, la presidente hace exactamente lo mismo que él. Encabeza las aburridas mañaneras, se mantiene pertrechada en el lujoso Palacio Nacional y hace una que otra gira. Al menos no juega beisbol o come fritangas como lo hacía su antecesor todos los días, pero tampoco se ven avances con ella. Se mantiene lejos de todos, presume diálogo con los mexicanos pero ni eso hay, mucho menos con otros actores, entre ellas las madres buscadoras y eso que dijo que iba a representar a todas las mujeres.

    Hay que hablar de la realidad, la violencia ha aumentado y su proyecto económico, si lo hay, tiene muchos huecos y ni siquiera, tras su necedad para apoyar una reforma judicial estúpida y con un sinfín de errores, puede garantizar que las inversiones extranjeras, si las hubiera, llegarán a buen término. El colmo es el hecho de que quiere que trenes de pasajeros y carga recorran gran parte del país, cuando existen carreteras y caminos que reducen el tiempo de recorrido.

    Peor aún, en las universidades, bachilleratos, secundarias y hasta en escuelas primarias existe ya un adoctrinamiento hacia los alumnos con proyectos de izquierda, salvaguardados por una mísera entrega de recursos. O sea, hay un afán, más que de resaltar al país y sus bondades, en convertirlo en un país encaminado a una izquierda que ha puesto a la deriva a países como Cuba, Venezuela y Colombia, por ejemplo.

    Por supuesto, el peor ejemplo es Cuba, que inclusive ha sido sancionado por China por el hecho de que la deuda con ellos se ha vuelto impagable. Lo más grave es que en las escuelas públicas resaltan que contra Cuba hay un bloqueo económico cuando en realidad hay un embargo del que siempre fue responsable el extinto dictador Fidel Castro.

    En fin, la izquierda para nada ha sido progresista y hoy los principales gobernantes y dictadores se han enriquecido descaradamente y sus gobernados se han vuelto más pobres, lamentablemente y eso, en algún momento pasará con México si es que muchas empresas deciden marcharse al no haber legalidad y sí un empecinamiento del gobierno en cambiar su política.

    Afortunadamente, para que el modelo económico cambie falta mucho o quizá nunca suceda, pues beneficia el hecho de que el principal socio comercial es Estados Unidos cuyas importaciones son de aproximadamente un 80 por ciento en relación con México.

    Veracruz

    Cuitláhuac García Jiménez está cerca de dejar su cargo, afortunadamente. Su administración ha sido tan mala que ni siquiera ha sido tomado en cuenta para unirse al gobierno federal tras una supuesta promesa de la entonces candidata Claudia Sheinbaum.

    No hay obra pública, ni siquiera una obra emblemática con la que se le pudiera recordar. Se rodeó -en su mayoría- de un grupo de inadaptados que se dedicaron a obedecerle y con ello, rindió cuentas a su entonces jefe, el presidente López que pareció no darse cuenta del terrible gobierno del veracruzano. Quizá sólo algunas áreas le trabajaron medianamente, con sus carencias, claro.

    Hoy, existe un sistema de salud que pudiese haber sido más competente pero que careció de medicamentos y sobre todo, de cirugías y tratamientos para pacientes delicados. Los niños, olvidados y lo que es peor, no hubo nada qué destacar, pues el gobernador careció de preparación para lo que se suponía, un cargo importante.

    Mal le fue a Veracruz y no se esperan mejores cosas con Rocío Nahle que, junto con su esposo, ha estado en la mayor parte de los titulares debido a sus pensiones, sus propiedades y en el caso de ella, por su rara administración y construcción de la refinería “Dos Bocas”, en Tabasco y que, al día de hoy, aún no refina nada, nada.