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    Bernardo Gutiérrez Parra

    Desde el Café

    Este lunes y en su primer día laboral como titular de la SEV, la maestra Claudia Tello Espinosa dijo de manera tajante: “No habrá más aviadores en la Secretaría de Educación de Veracruz… no vamos aceptar aviadores en ningún lado de la Secretaría, ni uno solo”.

    Es evidente que nadie le dijo que esa promesa ya es vieja; que la han repetido por generaciones casi todos sus antecesores. Y los aviadores ahí siguen, vivitos y cobrando.

    En su momento, el titular de la SEV Zenyazen Escobar, dio a conocer una pista de aterrizaje en el COBAEV con un sorprendente número de aviadores capitaneados por la diputada priista Erika Ayala Ríos, que tenía en la nómina hasta a su hijo menor de edad cobrando como maestro.

    Como sucede en estos casos se armó el escándalo, se cruzaron apuestas sobre lo que duraría Erika como legisladora antes de que la desaforaran… y no pasó nada.

    Pero la maestra Tello dijo más: “Vamos a buscar que la calidad educativa se vuelva una excelencia, salir de ese lugar que traemos, el número 25 a nivel nacional en rezago educativo”. Con lo que exhibió a Zenyazen que por cinco años presumió que la calidad educativa en las escuelas de Veracruz era de las mejores del país. Y mintió.

    Aunque si algo sacudió al edificio de la SEV fue la remoción, en cuestión de minutos, de más de 130 directores, subdirectores y jefes de área.

    De acuerdo con el periodista Arturo Reyes Isidoro, llegaron a la Oficialía Mayor de la SEV 40 nuevos titulares para igual número de oficinas; además de 10 a la Dirección Jurídica; 14 a la Subsecretaría de Desarrollo Educativo; 18 a la Unidad de Planeación y Control Educativo; 11 a la Secretaría de Educación Media Superior y Superior; 15 a la Subsecretaría de Educación Básica; 8 a las Áreas de Apoyo de la Secretaria; 4 a la Coordinación para la Difusión y Optimización de los Servicios Educativos y 15 a la Coordinación de Delegaciones Regionales.

    Según Arturo todos arribaron al mismo tiempo y bien trajeados (nada de guayaberas), a informar a los que aún ocupaban las oficinas que a partir de ese momento estaban cesados.

    Los analistas aseguran que la denuncia sobre los aviadores, sobre el rezago educativo y el cese fulminante de tanto burócrata, fue un golpe para Cuitláhuac García y puede que sí. Pero la inercia del golpe le pegó a Zenyazen Escobar, candidato favorito de Cuitláhuac a sucederlo en el cargo.

    Con el apoyo de su amigo el gobernador y con la pandemia encima, Zenyazen se dedicó a recorrer el estado dizque para atender personalmente las necesidades de maestros y educandos, cuando en realidad buscaba apoyos para su candidatura.

    También formó su escuadrón de aviadores compuesto por periodistas, columnistas, amigos del alma y gente de otros partidos principalmente del PRD que lo apoyaron incondicionalmente. (A éstos y no a otros aviadores, se refirió la maestra Tello).

    Zenyazen movió millones que salieron de la SEV para sus mítines multitudinarios, para el movimiento Maestros con Morena (MCM), para comprar voluntades y agenciarse lealtades, para ofrecer comilonas y para pegarle a Rocío Nahle.

    Al final perdió y se fue al Congreso de la Unión donde ha mantenido un bajo perfil. Pero lo que dijo el lunes la maestra Claudia Tello debió preocuparlo porque sabe que la funcionaria no actuó por su cuenta.

    Para empeorar su panorama, ha trascendido que están investigando a Ariadna Aguilar Amaya que fuera Oficial Mayor de la SEV y a Jorge Miguel Uscanga Villalva, exsubsecretario de Educación Media Superior y Superior, señalados de desviar recursos. Ambos gente de Cuitláhuac pero cercanos a él.

    Todo lo anterior además de la posibilidad de que pudieran fincarle un juicio de procedencia y eventualmente desaforarlo para que responda por los millones de pesos que se evaporaron de las arcas de la SEV, deben tener a Zenyazen Escobar más allá de la zozobra y algo más que acalambrado.

    bernardogup@hotmail.com