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Salvador Muñoz
Los Políticos
La buena noticia… Álvaro Fidalgo ya es mexicano.
La mala noticia… No podrá jugar con la Selección Mexicana hasta el 2026…
Sí, precisamente el año en que se celebrará el Mundial de Futbol de Norteamérica (México, USA y Canadá… si Trump no dice otra cosa antes).
Por qué no puede jugar el tricampeón de las Águilas del América con el otro Tri, pero éste cromático?
De acuerdo a las reglas de la FIFA, para que un jugador nacionalizado participe en la selección del país que lo “adopta”, debe tener 5 años de residencia… y Fidalgo apenas llegó en el 2021.
¿Le parece justa esta disposición de la FIFA para los nacionalizados?
Bueno… también se habla de que hay otros detallitos que más que postergarle su entrada al Tri, se la impedirían:
La primera: No haberse formado en ninguna de las fuerzas inferiores de equipo mexicano, aunque eso sería pecata minuta que en un momento dado se podría salvar con una “dispensa”, como ha ocurrido con otros jugadores nacionalizados y que han participado en la Selección Verde.
La segunda: haber expuesto alguna vez su intención de ser seleccionado de la Roja, España.
¿Le parecen justas estas disposiciones para un jugador de la talla de Álvaro Fidalgo?
Es posible que el nacionalismo gane al talento de Álvaro Fidalgo y se consideren justas tales disposiciones que de aplicarse, le podrían dejar un espacio a un mexicano en el Tri… Aunque siendo francos, quizás la única que le apliquen al Tricampeón, sea la de la residencia efectiva de cinco años y las otras, se las dispensen… como en la política.
Lo digo por lo que declaró el dirigente del partido Morena en Veracruz, Esteban Ramírez Zepeta, de que en estas elecciones venideras se mantiene la disposición de que en el movimiento, se reservan el derecho de admisión…
El asunto es que en la militancia, si bien están de acuerdo con el NRDA moreno, la inquietud que los agobia es que los “nacionalizados morenos” pretendan ocupar espacios este 2025 que consideran, deben ser para los “morenos de nacimiento”…
Hasta donde se sabe, plantean sugerirle no sólo al mismo dirigente estatal, sino a la nacional María Luisa Alcalde, así como a Andy López Beltrán, con copia a la gobernadora Rocío Nahle y presidenta con A, Claudia Sheinbaum, le apliquen a quienes han brincado apenas a Morena, la de Fidalgo, es decir, que hagan “residencia” en el partido de mínimo, tres años… pueden que las nuevas adquisiciones de Morena venidas de otros partidos, tengan talento, pero primero, consideran, deben picar piedra, como quienes desde hace años, vienen haciendo el Movimiento…
Habrá que ver si estas inquietudes igual no se expanden a otros partidos… como Movimiento Ciudadano, PT y PVEM… en el caso del PRI y del PAN son más los que se quieren salir, que “nacionalizar”…
Mientras, a la de Ebrard o a la de Andy, habremos de ver a Fidalgo quizás hasta el 2030… si otra cosa no ocurre.