Vicente Luna Hernández
El sábado morena celebrará – desde su punto de vista – 7 años de la llegada al poder acompañado con el pueblo, 7 años de una transformación que presumen a traído dicha y felicidad al país, no hay cabida a la auto crítica, no hay permiso a disentir, no se aceptan los señalamientos de opacidad en el manejo de los recursos públicos, de soberbia en el ejercicio del poder, de ostentación y despilfarro en recursos del pueblo, de complicidad entre altos integrantes de morena y el crimen organizado, de financiamiento ilegal en sus campañas, de debilitamiento o control de organismos responsables de ser un contra peso al poder ejecutivo, de romper u olvidar sus proclamas y “gritos de guerra” cuando eran oposición en las filas del PRD, ¿se le puede culpar a morena? ¿es morena quien debe aceptar, señalar y debilitar su narrativa triunfadora?
La oposición está paralizada, arrinconada, minimizada y dicho de manera concreta: ignorada por la población, la inconformidad social que existe camina sola, se organiza y se manifiesta sin necesidad de ser convocada por algún partido u organización política, es una realidad el rechazo en general a los partidos políticos pero es más el rechazo a los dirigentes nacionales de esos partidos, para bien o para mal, se señala a morena y oposición de la situación política del país pero por simple curiosidad: ¿Dónde quedan el partido verde y el PT?
Lo cierto es que – por el bien de todos – se necesita una oposición activa, crítica, contestaría ante el discurso triunfalista del gobierno federal, una oposición propositiva y con un plan de gobierno alternativo – desde su punto de vista – que atienda las principales demandas de México, no se trata de ser oposición en el discurso y aliado del poder en los hechos , la congruencia política debe ser la mejor carta de presentación ante aquellos que buscan una alternativa de gobierno, más territorio y menos escritorio debe ser el principal motor de operación política para lograr captar las simpatías del pueblo bueno y sabio.
La realidad es que unos dirigentes nacionales partidistas cuestionados en su desempeño como funcionarios públicos son muy útiles al discurso de morena para denostar al pasado, al ser ellos las caras visibles de sus partidos políticos son una carga que pesa en los hombros de sus militancias, no ayudan en los discursos de transparencia que impulsan en todo escenario si tienen “fantasmas” guardados en el “closet” de sus desempeños cuando integraron un poder ejecutivo o integraron un poder legislativo, ¿como hablan de democracia participativa si en sus partidos solo permiten la participación de sus aliados y subordinados? ¿Cómo creerles en su exigencia de rendición de “cuentas” cuando lo que menos hacen es rendir cuentas a sus militancia? Es lamentable pero es cierto: “el peor enemigo de la oposición es la propia oposición actual”.
Seguramente en todos los partidos de oposición – PRI,PAN, MC – hay mujeres y hombres con talento que muchas de las veces actúan a contra corriente de sus propias dirigencias, sin embargo, se requiere algo más para lograr aglutinar la inconformidad social existente, es tiempo de que esas mujeres y hombres se vuelvan más activos en todos los aspectos, no se trata de protagonismos “baratos”, se trata de tener un discurso apegado a la realidad social del país, señalar con argumentos las deficiencias del gobierno pero al mismo tiempo, elevar la discusión política, no se trata de ofender al próximo, tampoco de caer en un lenguaje vulgar y corriente, tampoco de hacer señalamientos a la ligera o para salir a la luz pública, se trata de llevar a su máximo nivel la palabra “política”, dignificar su significado y mostrar congruencia entre el hacer y el decir.
El próximo año habrá nuevos partidos políticos en el escenario nacional, más allá del número de partidos se exige una mayor calidad de oposición, es mucho lo que estará en juego en el proceso electoral que inicia el próximo año, el 2026 será un año de lanzamiento de figuras políticas rumbo a los 300 distritos electorales federales.
Más allá de las 17 gubernaturas que estarán en juego en el 2027 muchos le apuestan al control de la Cámara de Diputados, o morena y aliados mantienen una mayoría calificada que significa “hacer lo que quieran” sin necesidad de hablar con la oposición o se integra un contrapeso al poder ejecutivo.
En Veracruz – no se cantan mal las rancheras – la “pobreza” de la oposición nacional se pasea campante en sus 19 Distritos federales y 30 Distritos locales, el pueblo bueno y sabio esperan a hombres y mujeres que abanderen con dignidad una inconformidad social que se respira y que ha quedado de manifiesto en las manifestaciones públicas que se han llevado a cabo, nadie puede negar ese escenario pero -parece- que las dirigencias de los partidos opositores solo están ocupados en las prerrogativas legales a las que tienen derecho, ¿la inconformidad social? A esos reclamos los piensan atender a inicio de las campañas electorales.
Morena prepara su fiesta para mañana sábado acompañado de sus aliados PT y partido Verde, si bien es cierto solo le da “rebanadas “pequeñas” van con ellos en el viaje y han contribuido de manera importante desde el Congreso de la Unión a fortalecer el 2° gobierno de la llamada 4 transformación, hablar de sus dirigencias es digno de análisis posterior.
Morena y aliados estarán de manteles largos, el sol brillará más que otros días, tienen – desde su punto de vista – mucho que celebrar, la pregunta es: ¿tiene algo que celebrar la oposición? ¿Entre el primer gobierno de morena y el segundo tuvieron un crecimiento electoral? ¿La “pobreza” de la oposición va de acuerdo a la “pobreza” política de sus presidentes nacionales?
Que nadie culpe a morena de celebrar y de estar en permanente contacto con su base social, el análisis del gobierno que existe en México se hace de manera permanente, las calles han hablado y han sido testigo de una inconformidad social que busca incidir en la toma de decisiones desde el poder, que cada parte haga su tarea, unos exaltando su logros y otros señalando sus fracasos, en el fondo se encuentra como llevar a las urnas ese descontento social para equilibrar las fuerzas políticas y el ejercicio absoluto que en estos momentos tienen morena, de nada servirá gritar consignas contra el poder o llenar las plazas sino se llenan las urnas para lograr un equilibrio en la Cámara de Diputados, ¿los gobiernos estatales? Esa es otra historia…
Que mañana se parta el pastel y se suelten los globos pero al otros día – o tal vez el mismo día – la realidad dará de bofetadas al poder para enmendar errores y a la oposición para qué estén a la altura de las circunstancias sociales del país.
Que empiece la fiesta.
P.D.- Con el ánimo que – a pesar de los dirigentes partidistas cuestionados, señalados y con mala imagen pública – exista una oposición activa y consiente de que tienen mucho que hacer más allá de hacer declaraciones estruendosas…Escribiré otro día.