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    Omar Zúñiga

    De Primera Mano Tajín

    La semana anterior publiqué esta colaboración, a colación (así cacofónico) de una reunión que sostuvo el prestigiado Grupo de los Diez con Ulises Ruiz, rebelde exgobernador del PRI, que dio pie a un intercambio en principio epistolar con la diputada electa tricolor Lorena Piñón, a quien agradezco el encuentro.


    Pues bien, honor a quien honor merece y no, no me pesa reconocerlo, pues al final del día los que nos dedicamos a este negocio de quien Gabo dijo que se sufre como un perro, pero es el mejor oficio del mundo, es porque nos debemos a usted, estimado lector y nuestra obligación es presentarle ambas caras de la moneda.
    Lorena explica que realmente no entiende el porqué de la actitud de Ulises en contra de ella, porque ella consideraba eran amigos, hasta que ya no lo fueron y descargó su frustración en contra de ella, luego que le rechazaron la candidatura a la presidencia del CEN del PRI.
    En ese tema, Piñón aclara, con documentos en mano, que efectivamente fue expulsada del PRI durante 12 días, por haberse atrevido a aspirar a la dirigencia nacional del tricolor y hacer unas declaraciones que resultaron incómodas para la presidencia en turno quien ordenó su expulsión inmediata, cosa que sucedió y el hilo se rompió por lo más delgado al encontrarle la postulación a una candidatura por el PAN, supuestamente, pues esta sólo existió en un medio local de la zona de Martínez y de ahí bastó para que se agarraran y la expulsaran.
    Inquieta y nunca dejada, interpuso una queja para proteger sus derechos políticos que a la postre dio resultado, pues al final demostró ante el Tribuna Electoral que nunca fue postulada por Acción Nacional y terminaron restituyéndole sus derechos partidistas, regresándole su militancia tricolor de 17 años.
    Explica que ella nunca ha traicionado a nadie y que en su vida política y en los cargos públicos que ha ejercido (presidenta del Injuver, por ejemplo) nunca ha tenido señalamientos ni observaciones por algún mal manejo de recursos o algo parecido, a diferencia de otros actores políticos.
    Y reitera que nunca ha traicionado a nadie, sigue con su militancia aún cuando ha recibido varios reveses en su vida política, “y sí, en el PRI sí hay un traidor y no soy yo”, sostiene la diputada electa, quien por cierto reconoce que por supuesto a su partido le fue del carajo (palabras mías) en la reciente elección y prueba de ello es que la bancada tricolor veracruzana, otrora poderosa y decisiva en el Congreso del la Unión, la Legislatura que tomará posesión el próximo 1 de septiembre en San Lázaro tendrá sólo dos diputados… Pepe Yunes y ella; Pepe, por supuesto, será el coordinador… uuuuuffff.


    Por cierto, una felicitación a Jacobo Domínguez Gudini, quien recientemente recibió un reconocimiento en el Senado de la República, por su labor docente en el Instituto Belisario Domínguez, durante la graduación de la especialidad en Derecho Parlamentario. ¡Enhorabuena!

    ¡Qué barbaridad!
    deprimera.mano2020@gmail.com