Enrique Yasser Pompeyo
Mesa de Redacción
Sin pena ni gloria, así pasaron los cuatro años del alcalde de Banderilla, Juan Manuel Rivera González.
Y más de un ciudadano se pregunta, ¿en qué se gastó el gobierno local el dinero de los contribuyentes?
Porque para la población, el presidente municipal no aplicó los recursos, agarró la pandemia del coronavirus covid-19 como pretexto y dejó fuera los programas que fomentan el tejido social.
Los ciudadanos lo tienen muy claro. Son muchos los casos que ponen de manifiesto la corrupción municipal. Destaca la falta de apoyo tras la crisis de la pandemia, tanto en salud, como en economía, así como las recientes afectaciones que sufrieron varias familias tras el paso del huracán Grace.
Pero, además, en enero no se entregaron juguetes ni apoyos a los estudiantes de los diferentes niveles, como se realizaba año con año.
La política pública que Juan Manuel Rivera tanto difundió y ofreció a los padres de familia en su primer año de gobierno de entregarles uniformes y zapatos a los estudiantes durante toda su administración, nunca se llevó a cabo.
La Tesorería no realizó la rifa de un automóvil y artículos para el hogar como se hacía año con año para motivar a los contribuyentes que cumplían de manera puntual con el pago del predial.
En febrero, las bodas colectivas quedaron suspendidas, por lo que la Tesorería nuevamente se vio favorecida al no tener este gasto.
Así llegó marzo y el Día Internacional de la Mujer pasó desapercibido, ya que tampoco hubo eventos, ni apoyo a las mujeres, ni programa o gestión que las favoreciera.
Tampoco se celebró el Día del Niño, Día de las Madres, curso de verano, en fin, Banderilla tuvo en Juan Manuel Rivera González a un presidente municipal incapaz, poco productivo, insensible a los problemas que enfrenta su municipio, intolerante con la atención a los ciudadanos, inmaduro en la toma de decisiones, siempre esquivando toda clase de petición, reclamo y queja de la población.
Corrupto en la ejecución de la obra pública, hace unos días fue denunciado en redes sociales por ciudadanos, ya que no recibieron el apoyo de vivienda, se habla de casi 100 cuartos habitación.
Acusan que el director de Obras Públicas, Antonio Morales Padilla les pidió una aportación de cinco mil pesos a cada ciudadano y hasta el momento no han recibido nada y tampoco les regresan su dinero.
La pandemia llegó a Banderilla y como era de esperarse, Juan Manuel Rivera González no supo qué hacer, la crisis lo rebasó por completo.
En varias ocasiones, el alcalde fue exhibido por esconderse en plena pandemia. Con fotografías, ciudadanos reclamaban en redes sociales la compra que hizo de una caminadora por casi 200 mil pesos para no salir a correr y así evitar que la ciudadanía le exigiera apoyos.
Banderilla fue castigado por su alcalde; además, la presidenta del DIF y esposa de Rivera González, Catalina Godoy se olvidó de la Casa del Abuelo y de los adultos mayores, de las familias más vulnerables.
Hoy, el rezago en el municipio es evidente. No hubo desarrollo en economía, en obra pública, en educación, ni en salud.
enriquepompeyo@hotmail.com