Enrique Yasser Pompeyo
Mesa de Redacción
Los delitos en el estado de Veracruz continúan sin que las autoridades logren frenarlos; tampoco se observan acciones que los prevengan y mucho menos algún trabajo de inteligencia.
De acuerdo con el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, de enero a septiembre de 2021, se contabilizaron mil 566 homicidios en general; en el caso de homicidios dolosos fueron 837.
Apenas este domingo, en el municipio de Acayucan, un taxista fue baleado y su copiloto resultó herido.
También en la zona sur, en el municipio de Playa Vicente, fue hallado ejecutado un hombre a un costado de un camino de terracería.
Con respecto a los feminicidios, los datos oficiales sostienen que solamente hubo 55 casos en el mismo periodo; en el caso del delito de lesiones se registraron 6 mil 554.
Acerca de los secuestros, el organismo federal establece que únicamente hubo 39 casos; sobre las extorsiones, la cifra fue de 569 casos. Los robos a transportistas también siguen. El dato oficial es de 152 casos.
La población también resiente la inseguridad que prevalece en todo el territorio veracruzano. La cifra de robos a casa habitación asciende a 2 mil 272. El robo a transeúnte en vía pública fue de 2 mil 97 casos.
La lista de delitos es amplia y a pesar de que las autoridades insisten en mantener su postura de que todo se encuentra bien, los hechos diarios muestran una inseguridad creciente, aunado a los hechos sangrientos.
A pesar de las cifras que vaya a presentar el secretario de Seguridad Pública, Hugo Gutiérrez Maldonado en la glosa del tercer informe de gobierno, ¿lo creerán los cientos de familias que han perdido a un familiar por un secuestro, por un feminicidio o por algún otro hecho delictivo?
Las cifras de los delitos se pueden maquillar o modificar para presentar una realidad distinta a la que sufren y padecen de manera diaria los veracruzanos, pero eso no cambiará la ola de inseguridad en la que se encuentra sumergido el estado de Veracruz.
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