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    Sergio González Levet

    Sin tacto

    Ajá: la concentración del sábado pasado en la Plaza Lerdo a favor de ir a votar a la (no) revocación de mandato no fue organizada por nadie.


    ​Ajúa: fue una explosión popular nacida del profundo amor que le tiene el pueblo bueno y honrado al patriarca.
    ​Ajá, ajá: el Gobierno del Estado no gastó un solo centavo en la manifestación del sábado pasado.
    ​Ajajá: los autobuses en los que vinieron los manifestantes de todo el estado fueron pagados por cada uno delos viajeros.
    ​Ajajúa: los becarios de los programas de ¿bienestar? cooperaron de lo que reciben para pagar cada uno su viaje.
    ​Reajajá: ningún empleado de gobierno fue convocado u obligado a asistir.
    ​Rerreajajúa: los gastos de la concentración en la Plaza Lerdo los pagó una asociación civil (que nació de la nada y en un día, sin que se sepa de dónde, sacó sus recursos que aplicó concienzudamente para que llegaran los camiones, se repartieran las tortas y los bolis, se encauzara a los viajantes).
    ​Y ajajajá: la Secretaria de Energía, Rocío Nahle, ya es jarocha por obra y gracia de su tuiter en el que afirmó que “miles de veracruzanos nos concentramos ayer en la Plaza Lerdo en Xalapa en apoyo a nuestro presidente Andrés Manuel López Obrador”. ¿Pero qué la señora no es nacida en Zacatecas? ¿Pero qué no es cierto que está impedida de aspirar a la gubernatura de Veracruz porque se lo impide la Constitución estatal, ésa que el gobernador Cuitla juró guardar y hacer guardar?
    ​Ajá, ajá, sí cómo ñonguis, diría mi nieta de casi tres años.
    ​Más malo que un mentiroso, es un mentiroso cínico, y peor aún es un mentiroso cínico y tonto (me reservo el término más adecuado).
    ​¿Creerá verdaderamente el gobernador Cuitláhuac García que los veracruzanos nos tragamos sus embustes, dignos de un niño de primaria?
    ​Hay leyes que el impetuoso mandatario viola permanentemente, y eso se le va a revertir.
    ​El pueblo no es tonto, como él… cree.
    ​Yo le pregunto; cuántos de esos miles que acarrearon el sábado pasado van a ir realmente a votar el domingo 10.
    ​No serán un millón 600 mil veracruzanos, como está exigiendo el tropical Patriarca en la cuta que fue imponiendo a cada gobernante estatal, según su padrón.
    ​Por eso, el futuro a partir del día 11 será ominoso para el grupo cuitlista.
    ​A las pruebas nos remitimos.
    ​A las pruebas reales, no a las mentiras con que quieren ocultar la realidad… y su propia corrupción.

    sglevet@gmail.com