Enrique Yasser Pompeyo
Mesa de Redacción
A dos años y medio de que concluya la administración del gobernador de Veracruz, Cuitláhuac García Jiménez, parecería que ya se le olvidó lo que prometió a familiares de personas desaparecidas.
En su toma de protesta como titular del Ejecutivo, manifestó: “hago pública la declaratoria del programa emergente por crisis de violaciones de derechos humanos en materia de desaparición de personas en Veracruz».
Y prometió: “lo más importante y urgente es brindar a las personas justicia, verdad y reparación, y en ese contexto localizar a todas las personas desaparecidas».
Pues parecería que sus palabras se las llevó el viento. Cada día hay más quejas de familiares y colectivos.
Por citar un ejemplo. Los señalamientos realizados este martes por familiares de personas desaparecidas tras una diligencia de exhumación en el panteón Palo Verde de Xalapa, también muestra la ineficiencia del personal de la Fiscalía General del Estado.
Como lo dieron a conocer los medios de comunicación, al realizar los trabajos de excavación en busca de restos de una persona, los peritos encontraron los de cuatro más y en lugar de llevárselos para identificarlos, los dejaron.
Aunado a eso, las madres y los colectivos también denuncian la falta de diálogo de la fiscal Verónica Hernández Giadáns.
No es la primera vez que las familias señalan el desinterés y carencia de empatía de la funcionaria estatal.
A pesar de las solicitudes de audiencia, parecería que a Hernández Giadáns simplemente no le interesa dialogar con ellos y prefiere encerrarse a piedra y lodo en sus oficinas o donde quiera que se encuentre.
Mientras las familias prácticamente buscan por su cuenta y con sus propios recursos, Cuitláhuac García y Verónica Hernández sólo repiten su gastado discurso de que sí se trabaja.
Así, han transcurrido casi tres años y medio de la actual administración estatal y la crisis por desaparecidos en Veracruz, empeora.
Cuitláhuac García concluirá su encargo y se irá, pero las familias de desaparecidos se quedarán a seguir buscando y del gobernador, quizá, sólo recuerden lo que dijo al inicio de su mandato: “no estemos solo tristes por su desaparición, no olvidemos que el cobijo de su amor los hace presentes. También abriguemos la esperanza porque los vamos a buscar hasta encontrarlos”.
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