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    Mariana G. de León

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    Varias personas fueron entrevistadas, pero prefirieron permanecer anónimas debido a su fuerte, aunque acertada opinión acerca del sistema de transportes urbanos en la ciudad de Xalapa. Es gente de todo tipo: jóvenes hombres y mujeres, ancianas y ancianos, madres y padres de familia, y hasta a sus hijos les pregunté cuál es su parecer ante la experiencia de utilizar estos servicios.
    Y resulta que son muy pocos los choferes capacitados para una responsabilidad tan importante, que es llevar a sus pasajeros a salvo a sus destinos correspondientes. Son muy pocos los autobuses limpios y funcionales. Casi todos necesitan ser pintados, llevados al mecánico; que les cambien las ventanas rotas, los fumiguen y forren los asientos. Muchos conductores son groseros, no manejan bien (por decirlo de alguna manera), y del uso de uniformes y otras buenas costumbres ni se hable. Necesitan capacitación urgente.
    Si nos fijamos en la Ley de Tránsito del Estado, no se solicita un curso ni pasar un examen para obtener la licencia de manejo. Con pagar la tarifa necesaria se completa el trámite y el papeleo, y a cualquiera, de verdad a cualquiera, le dan su licencia de manejo en unos minutos después de tomar la foto y registrar en el sistema al individuo en cuestión. Esa falla es gravísima, sobre todo en una ciudad en donde la vialidad está muy mal organizada.
    Para empezar, en la ciudad no existen escuelas a la altura para formar gente que desarrolle una estructura mental o una metodología siquiera decentes.
    Me gustaría proponer soluciones, pero no soy ninguna experta en el tema, aunque sí me consta que las necesidades de los usuarios de este servicio son la puntualidad al llegar a las paradas y terminar con la incertidumbre de los pasajeros de a qué hora va a pasar el «carro» [sic]; hace falta una aplicación móvil para monitorear por dónde van los autobuses, eso ya es cosa de la modernidad, es tangible y es factible; necesitan un sistema nuevo para mostrar el recorrido de cada camión; por ejemplo, de toda la gama de colores que existe, que pinten cada unidad según su ruta y así las personas puedan identificar entre el caótico tráfico y la oscuridad de Xalapa hacia dónde se dirigen.
    La lista de detalles para corregir sigue, pero es lo primero que se me ocurre para volver este servicio más cómodo a los usuarios.

    margl84@gmail.com