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    Sergio González Levet

    Sin tacto

    Mi pésame y mi condolencia a mi amigo Héctor Yunes Landa por la sentida pérdida de su padre. Descanse en paz don César Yunes Faisal.

    Una vez que el Presidente de la República decidió seguir con su malhadada política de contestar con vulgaridades o con insulseces a señalamientos serios sobre acciones o declaraciones vertidas desde su investidura, se abre la puerta para que las otrora benditas redes sociales y los memes implacables continúen denostando y sobajando la figura presidencial, de la misma forma que lo hace su recipiendario al no mostrar la actitud respetuosa que correspondería al jefe de las instituciones públicas, puesto en ese pedestal de la patria por la voluntad de la mayoría de los ciudadanos que acudieron a votar en junio de 2018, a los que en teoría debe representar con respeto y altura.


    No sé qué estaba pensando Andrés Manuel López Obrador cuando mandó a poner en la pantalla de su mañanera una canción de su paisano, el famosísimo y mariguano ¿compositor? Chico Che, que falleció a la temprana edad de 43 años, víctima de sus excesos y sus adicciones (vaya, ¡todo un ejemplo para la juventud mexicana!).
    Y lo peor es que con esa canción arrabalera el titular del Poder Ejecutivo se propuso contestar a analistas serios y periodistas prestigiados (él sólo atina a calificarlos de conservadores y chayoteros) que se preocupan porque el Gobierno de Estados Unidos -y ahora el de Canadá también- ha empezado a hacer un extrañamiento por el cambio de línea en la política para el sector energético obradorista, que pretende -dice AMLO- salvaguardar los intereses nacionales, aunque vayan en contra de lo pactado en el TMEC por los tres países del área de Norteamérica.
    Que el dólar va para arriba, y el peso sigue bajando,
    Uy qué miedo, mira cómo estoy temblando.
    La canasta va pa’ arriba, y ni peligro que bajando,
    Uy qué miedo, mira cómo estoy temblando.
    Uy-uy-uy qué miedo, uy-uy-uy qué miedo.
    Mira cómo tiemblo, que bailar casi no puedo.
    Y el ingenio mexicano que corre en Internet de inmediato le cobró el desliz al Presidente, pues le están endilgando canciones del ciclón tabasqueño a sus cercanos:
    José Ramón López Beltrán y su casa gris: ¿Quén pompó?
    Adán Augusto López Hernández: Qué culpa tiene la estaca si el sapo viene y se ensarta.
    Claudia Sheinbaum: Se tamba, se tambalea.
    Ricardo Monreal: Dónde te agarró el temblor.
    Marcelo Ebrard: Yo soy un muchacho guapo.
    Rocío Nahle: Ni tan gorda ni tan flaca.
    Es que el que se ríe, se lleva.

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