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    Enrique Yasser Pompeyo
    Xalapa

    El diputado local por Perote, Paul Martínez Marié presentó una iniciativa para modificar la Ley Orgánica del Municipio Libre del Estado de Veracruz en su artículo 49, fracción primera, para que exista la obligatoriedad de crear un Instituto de Salud Mental y contra las Adicciones en cada uno de los municipios.

    «Para atender este grave problema de salud pública en que se ha convertido ya, derivado de muchos sucesos que han venido incrementando el consumo de sustancias dañinas para la salud, sobre todo que generan fácil adicción y graves daños irreversibles a la salud».

    El diputado comentó que si se analiza dónde se atienden actualmente esos casos, la mayoría son atendidos por los DIF municipales, algunas clínicas de salud o algunos organismos civiles como Alcohólicos Anónimos.

    «No es lo mismo atender a una persona enferma de alcoholismo, que a un enfermo de adicción a las drogas, sobre todo ahora con las drogas sintéticas que son tan dañinas, de fácil acceso y adquisición, lo que lo vuelve todavía más grave y peligroso».

    El legislador expuso esta situación antes se veía sólo en las grandes ciudades, en las manchas urbanas, pero, ahora, ha llegado a las zonas rurales.

    «Además del problema de salud pública grave, va a generar improductividad en el futuro, porque estos jóvenes que hoy se enganchan de las drogas, van a disminuir la potencialidad que tengamos en cuanto a la población económicamente activa».

    Asimismo, acotó que esto también provoca desintegración familiar, así como incremento en los índices delincuenciales.

    Finalmente, indicó que se carece de cifras, porque no hay estudios, porque no hay institutos que se encarguen de ello.

    «Existe la Comisión Nacional contra las Adicciones, que se coordina con una comisión que existe en Sesver, pero como la gente no conoce y es insuficiente el servicio, pues no llegan a atenderse y eso no genera cifras reales sobre la gravedad del problema, están dispersos».

    Incluso, refirió que padres de familia por desconocimiento llevan a sus hijos con curanderos para atender un tema de drogadicción.