Enrique Yasser Pompeyo
Mesa de Redacción
La crisis en el Ayuntamiento de Sayula Alemán está escalando a situaciones más complejas y delicadas en donde quienes resultan perjudicados son los ciudadanos.
Este es otro municipio en el que el crimen organizado, se presume, ha permeado, de manera que es urgente que las autoridades tomen cartas en el asunto.
Si como ya lo ha referido el propio gobernador en el sentido de que grupos delictivos se disputan el control, tanto el gobierno federal como estatal deben actuar de manera rápida y contundente.
Además, como ya lo han solicitado los ediles de ese ayuntamiento, el Congreso del Estado debe analizar si es viable y pertinente la desaparición de poderes en Sayula de Alemán.
Pues como han referido tanto el síndico y los regidores, en el municipio existe una parálisis administrativa.
Ni los trabajadores han cobrado sus últimas quincenas, incluido el aguinaldo, ni los servicios se brindan de manera normal y eficiente.
¿Desaparecer los poderes e instalar un Concejo Municipal es lo mejor?
Esa respuesta la tienen los diputados, pues, además, ya ha transcurrido el primer año de gobierno municipal y tampoco se avanza en obra pública.
¿Cuál sería el peor escenario?
Lo peor que puede suceder es que haya muertos. No se desea, por el contrario, se confía en que las autoridades asuman su responsabilidad en el ámbito de sus competencias y resuelvan a la brevedad la crisis que se vive en Sayula, por el bien de la población, por el bien de todos.
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