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    NdelaR

    El próximo años será electoral y sin duda Veracruz es uno de los bastiones más importantes por ello se reunieron el Presidente del CDE del PAN Veracruz, Federico Salomón Molina, parte de su Comité y el ex dirigente Estatal de Acción Nacional, Joaquín Guzmán Avilés, se reunieron con el Presidente Nacional del Partido, Marko Cortés.

    Hay que recordar que Guzmán Avilés además de haber sido presidente del PAN, cuenta con el apoyo del 50 por ciento de la militancia en el estado, de tal forma que sin su apoyo, el partido no la arma en las próximas elecciones estatales y eso Marko Cortés lo sabe, por lo que los invitó a dialogar.

    Sin embargo, para sorpresa de MK su dirigente veracruzano Salomón Molina en lugar de llevarle propuesta y soluciones se dedico a quejarse en toda la reunión, por falta de dinero, por los juicios laborales en contra del partido por despido injustificado, por no poder trabajar con poco recurso, bla bla bla bla, las quejas fueron infinitas, pero soluciones y proyectos electorales ninguno.

    Ante la falta de recursos por pagos de laudos laborales, el dirigente nacional le propuso que reduzca salarios, pero se escuchó un rotundo no en la mesa, “todo menos tocar el salario”, pues Salomón Molina no está dispuesto a recortar un peso de sus 30 mil mensuales que percibe, sin contar los viáticos que se gasta en quien sabe qué porque nunca va al partido y menos a los municipios donde en los Comités ya se quejaron que no les dan recursos.

    Lo que se le olvidó decirle Federico Salomón a Marko Cortés es que los juicios laborales que tiene el PAN Estatal son por los despidos injustificados que cometió en agravio de sus empleados a quienes sacó de partido, sin la intención de pagarles lo que por ley les correspondía.

    Y ahora tiene que enfrentar las demandas que el mismo provocó cuando pudo haberlas evitado a través del diálogo y negociando con los ex trabajadores, pero pudo más su ego y falta de capacidad tanto de él como de su equipo que jamás hizo nada para detener ese problema que ahora les está pesando, sin embargo nada pueden hacer porque la ley les favorece a los ex empleados.

    Quien si fue preparado, y se notó su experiencia política, fue Joaquín Guzmán, quien presentó propuestas y la oportunidad de trabajar en unidad pese a las diferencias que tuvieron al principio, dijo que es momento de trabajar en unidad para recuperar Veracruz y para ello necesitan hacer trabajo con la militancia y las estructuras.

    Reiteró que no es momento de echar culpas sino de demostrar trabajo por lo que exhortó a todos a ponerse la camisera del PAN sin diferencias al interior.

    “Siempre voy a pugnar porque se respeten los liderazgos que han trabajado por el partido y que saben conquistar el voto y la confianza de los ciudadanos, que realmente respeten la ideología del partido, es la única manera de ganar elecciones, desde el escritorio no se ganan, hoy debemos demostrar el amor a la camiseta, dejar de soñar en grandes nóminas a costillas del partido, no hay para eso”.

    Mas directa la flecha no pudo haber sido, sin embargo Guzmán Avilés sabe de política y la experiencia la demostró al dominar la reunión.