Vicente Luna Hernández
La acusación recurrente al INE bajo la presidencia de Lorenzo Córdova Vianello fue su – dichos del oficialismo – presunto protagonismo, se le señalaba por estar en contra de las decisiones del partido en el poder y aliados, por su burocracia dorada, por su falta de transparencia y su excesivo gasto operativo, sin embargo, llegaron nuevos consejeros y hay nueva presidenta del organismo y ya no es tema de debate nacional: su excesivo protagonismo su burocracia dorada, su falta de transparencia y su excesivo gasto operativo…desapareció del discurso presidencial por arte de magia.
Nunca se veía tanta magia desde el inolvidable Beto el “boticario”…que grande eres magazo.
Después del proceso 2006 y con el resultado electoral que todos conocemos, después de una injerencia del presidente Fox que afectaron la equidad y lastimaron la legitimidad del proceso electoral, en ese entonces la oposición comandada por un combativo AMLO – nadie como él para protestar con o sin razón – impulsó que se llevaran a cabo reformas electorales con la finalidad de impedir que el gobierno influyera a favor o en contra de aspirantes y partidos, parecía que México respiraría tranquilo después del 2006… parece que no es así.
Los desencuentros entre los presidentes Lorenzo Córdova y Andrés Manuel López Obrador fueron capítulos de telenovelas clásicas, amor al inicio y odio al final ¿quién respiro tranquilo al final del periodo de Lorenzo Córdova? ¿Quién pudo dormir ya más tranquilo? ¿Lorenzo o AMLO?
México es testigo del derroche de recursos económicos en la promoción de los aspirantes a la presidencia de la república, México se ríe de los lineamientos jurídicos y operativos para ajustar al marco Legar los procesos internos de los partidos políticos y por lo consiguiente de las corcholatas y no corcholatas, la historia nos dice que los fraudes electorales y las violaciones a la legislación electoral los lleva a cabo el partido que tiene el poder presidencial ¿ cuándo se ha visto que la oposición gane haciendo trampa?
Por el bien de todas y todos primero el INE debe ejercer total y absoluta autonomía en el ejercicio de sus facultades constitucionales, por el bien de México los actores políticos se deben ajustar al marco legal no el marco legal al proselitismo de los actores políticos, ¿acaso se necesita un 2006 para que el INE demuestre su autonomía? ¿Las reses de ayer serán los verdugos mañana? Si morena y aliados arrasan en las encuestas ¿necesitan “ayuda” del INE?
La propuesta es muy sencilla, el INE debe ejercer sus facultades sin que le tiembles manos y piernas y demás partes de su cuerpo colegiado, el INE debe mantener su independencia a influencia exterior alguna, las y los consejeros tienen una cita con la democracia ante el proceso electoral más grande en la historia de México, el INE debe mostrar su grandeza como institución baluarte de nuestra democracia, a la violencia por la delincuencia organizada que se respira en el país, es necesario un INE más organizado para no contribuir a conflictos sociales en varias regiones del territorio nacvional que hagan que el 2006 haya sido cosa de niños, ¿ quién gana con ese escenario? ¿En serio serán demócratas aquellos que ayer presumían de enarbolar la bandera de la democracia? ¿AMLO – en caso de ser adverso el resultado electoral- será un Zedillo o un Fox?
Es necesario que del discurso se pase a los hechos, la desigualdad social que tanta lastima la convivencia en México, no debe pasar a ser una desigualdad electoral en los que unos sacan ventajas políticas sin pena alguna por encima de la ley, ¿aplausos o condenas? Que México decida en el 2024.
P.D.- Con el ánimo que el ver “normal” la violencia en varias partes del país no nuble los ojos de la sociedad ante la violencia a las normas electorales… Escribiré otro día.