Alejandro Bustos
Sinapsis
Durante los últimos días, la precampaña presidencial de Xóchitl Gálvez ha sido un tsunami: Por una parte, explotó el escándalo del presunto plagio de su tesis de postgrado; por otro, sus números están estancados. Sus negativos en las encuestas son más altos que sus positivos. Pero ya llegaremos a ese punto.
Desde que formalizó su intención de contender por la presidencia de la república, su campaña parecía llevar la velocidad de un tren fuera de control; la gente se preguntaba: “¿por qué es tan popular?” El proceso interno del FAM se podría decir que lo pasó caminando y se impuso rápidamente entre sus competidores internos; sin embargo, es innegable que ha perdido un poco de tracción.
Incluso no sería descabellado reconocer que está enfrentando su primera crisis lo cual es absolutamente normal en cualquier campaña; no obstante, lo verdaderamente llamativo es que le haya llegado tan pronto en la competencia -apenas estamos a finales de septiembre-. Y me parece que no soy el único que lo está notando.
Si ha puesto atención, estimado lector, desde el miércoles pasado que explotó la bomba sobre su presunto plagio, ha habido un cambio de comportamiento dentro de la prensa que se considera de oposición y en teoría apoya su proyecto político.
El primero fue el periodista Marco Levario Turcott. Para quien no esté familiarizado con él, es mejor conocido en la red social X/Twitter, en donde se ha ganado fama por ser abiertamente anti López Obradorista y uno de los más fervientes Xochilovers en esa plataforma. Dirige la revista digital ‘Etcétera’ y resulta, cuanto menos curioso, que desde allí haya sido él mismo el que ha conducido la investigación del caso sobre el plagio de su tesis de maestría. Dicho de otra manera, le ha otorgado armas al oficialismo de Morena para atacar con mayor precisión a la exjefa delegacional de la Miguel Hidalgo.
Al mismo Turcott se le dio espacio, durante al menos dos días consecutivos, en Radio Fórmula para explicar el caso; concretamente, desde el noticiero vespertino de Pepe Cárdenas, periodista que destaca especialmente por ser un aguerrido crítico de la 4T.
Por si lo anterior le pareciera poco, a mí en lo particular me hizo encender las alarmas el hecho de ver un segmento del noticiero de Carlos Loret, en Latinus, en donde él, junto con Brozo, criticaban muy severamente a Xóchitl. Explicaban que ven la candidatura en un punto muerto y que más bien la actitud de Xóchitl no les parece seria. Hicieron notar que quizás ya sería hora de que se dejara de sus trivialidades y majaderías, y respondiera a los ataques con firmeza, no con vulgaridades. Por cierto, vale la pena recordar que Loret, como todos sabemos, es uno de los principales enemigos declarados e incómodos del presidente Obrador.
Cambio de giro
Todas estas críticas no debieron haber pasado desapercibidas dentro del núcleo interno de Xóchitl ya que desde el pasado viernes se empezó a correr el rumor extraoficial de que se formaría un nuevo equipo de comunicación, mismo que sería el encargado de ser la primera línea de defensa a todos los ataques que recibiera Gálvez. El expanista, Javier Lozano; la senadora, Kenia López; y el exmorenista, ahora senador plural, Germán Martínez, serían algunos de los nombres que integrarían la oficina de la vocería. Se espera que hoy lunes se haga oficial.
La poca organización y la respuesta tambaleante de Xóchitl ha generado una pequeña crisis que no han sabido manejar de la mejor manera posible. Aunado a ello, los números de los que hablaba en un principio debieron haber preocupado a los presidentes de los partidos que integran el Frente Amplio.
Hace unos cuantos días, el diario español El País publicaba una encuesta que habría sido levantada el entre 7 y 9 de septiembre, en donde le preguntaban a los encuestados: “¿qué opinión tiene acerca de los siguientes precandidatos?”.
Sorprendentemente, entre todos los nombres mencionados, Gálvez aparecía hasta el último lugar; inclusive el actor Eduardo Verástegui, que pretende participar en el proceso como candidato independiente, aparece por un pelo arriba de ella. La lectura del diario español es que, a día de hoy, la oposición todavía no representa una inquietud importante para el partido oficialista.
Si esta tendencia negativa continúa, no sería de extrañar que en el Frente se estuvieran planteando seriamente la posibilidad de dar una vuelta de 180 grados con la intención reemplazar a Gálvez -los partidos todavía tienen tiempo para hacerlo ante el INE, si así lo desearan-.
De otro modo, no se explica el cambio radical de actitud de cierto sector de la prensa y aliados de la oposición para atacar a Xóchitl en un momento que se considera crítico para consolidar su proyecto político.
O quizás la circunstancia sólo coincida con el viejo adagio: “cuando las ratas huelen que una tragedia se cierne sobre el barco que tripulan, son las primeras en abandonarlo”.
Fuente de la encuesta: https://elpais.com/mexico/elecciones-mexicanas/2023-09-14/claudia-sheinbaum-es-la-preferida-para-ser-presidenta-y-marcelo-ebrard-el-candidato-favorito-de-movimiento-ciudadano.html
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