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    Vicente Luna Hernández

    El pueblo manda, tonto es aquel que cree que el pueblo es tonto, las cosas ya no son como antes, la libertad nos hará libres, los de hoy no son como los de ayer, son algunas de las frases que la llamada 4 transformación ha repetido de manera permanente y como toda una estrategia de gobierno, sin embargo, – ante las diferencias con la UV – en Veracruz parece que los de hoy…sí son como los de ayer.

    Hoy al igual que ayer la batalla es por los recursos económicos que le corresponden a la universidad veracruzana, el artículo 10 de la constitución local es muy preciso, claro y concreto, en su párrafo tercero fracción X señala:

     «… en el caso de la universidad veracruzana, el presupuesto asignado no podrá ser menor al 4% del total del presupuesto general del Estado, previsto para el ejercicio anual respectivo, el cual deberá ministrarse conforme al calendario autorizado en los términos que establezca la legislación aplicable y, en ningún caso, el monto del presupuesto asignado será inferior al otorgado en el ejercicio inmediato anterior»

    Es cierto, en el 2016 ante circunstancias iguales la Rectora Sara Ladrón de Guevara junto con miles de universitarios encabezó una lucha justa en aras de que el gobierno cumpliera la entrega de los recursos económicos a la máxima casa de estudios, aparte de justa la demanda contó con la simpatía popular ante un gobierno desgastado y debilitado ante la opinión pública,  sin embargo, también es cierto, que manos de color azul y color guinda estaban al acecho.

    La Rectora encabezo marchas multitudinarias, la comunidad estudiantil se volcó a las calles para defender a su «casa de estudios», ciudadanos de diferentes estratos sociales marcharon e incluso egresados – nunca se deja de ser universitario – gritaron consignas a favor de la UV y se demostró que la comunidad universitaria es un tigre que no hay que provocar ya que se vuelve una marea difícil de contener al defender sus derechos consagrados en la Constitución de Veracruz, cuando se trata del presupuesto público asignado para su buena marcha, la universidad no debe tener color partidista, al igual que ayer no era un movimiento en contra del PRI ni hoy es un movimiento en contra de morena es – así debe ser- un movimiento en defensa de los derechos de la Universidad Veracruzana.

    Dicen que el dinero no sabe de ideologías ni de simpatías partidistas, hoy el Rector Martin Aguilar Sánchez debe encabezar y ser el líder – seguramente en el 2016 apoyó los reclamos de las autoridades universitarias, tal vez también marchó, tal vez también gritó consignas, hoy es mayor su responsabilidad, miles de universitarios seguramente apoyaran esos reclamos, ¿ a qué tiene miedo? ¿Estará a la altura de las circunstancias históricas que exige la universidad? Si no puede…que renuncie.

    Hoy que las redes sociales juegan un papel fundamental en la comunicación entre jóvenes y en la movilización social, las y los jóvenes universitarios deben asumir también su responsabilidad cono parte fundamental de la comunidad universitaria, su voz debe ser escuchada al interior y al exterior de sus aulas, el movimiento «artículo 10 constitucional» debe iniciar en cada salón universitario, la información es indispensable en toda acción, no se trata de salir a las calles a gritar consignas ofensivas, no se trata de permitir que manos ajenas a la universidad lleven agua a su molino, se trata de demostrar que las y los jóvenes a la hora de defender su «casa» están listos y decididos, tal vez más y mejor que la propias autoridades.

    El Rector organizó un Foro en los Lagos para sensibilizar a la sociedad, ¿ para sensibilizar a la sociedad o para sensibilizare él? la sociedad ya está sensibilizada, ¿no tuvo otro pretexto el Rector para disfrazar su tibieza? que no llore por los rincones de la Rectoría lo que no puede defender como principal responsable de la buena marcha de la universidad, su simpatía partidista – si es que la tiene – que no sea obstáculo para evadir su obligación, en uno de los discursos más dramáticos de un presidente en México, el 17 de agosto de 1981 José López Portillo expresó:  » …defendamos nuestro peso, esa es la estructura que conviene al país, esa es la estructura a la que me he comprometido defender como perro» ante circunstancia iguales y diferentes escenarios, la comunidad universitaria exige que el Rector tenga muy presente esas palabras.

    P.D.- Con el ánimo que la comunidad universitaria haga escuchar su voz sin titubeos…Escribiré otro día.