Enrique Yasser Pompeyo
Mesa de Redacción
Cuando se le pregunta a la fiscal general de Veracruz, Verónica Hernández Giadáns sobre los avances de los diferentes casos y las carpetas de investigación, señala que por secrecía no puede hablar.
Y así, cada vez que es cuestionada por los representantes de los medios de comunicación, se sale por la tangente.
El tema cobra relevancia, porque hasta el momento, salvo dos casos de ex alcaldes, no se sabe sobre la detención de ex funcionarios públicos o ex ediles que hayan incurrido en irregularidades por el manejo de las cuentas públicas.
De acuerdo con la titular del Órgano de Fiscalización Superior de Veracruz (ORFIS), hay denuncias interpuestas ante el “ente autónomo” por presuntas irregularidades en ejercicios fiscales que datan desde 2017.
Las dudas saltan, las interrogantes son varias. ¿Por qué, si el ente fiscalizador ha aportado las pruebas, la Fiscalía no ha actuado?
Verónica Hernández Giadáns repite una y otra vez que se aplica cero tolerancia a la impunidad, pero hasta el momento no se ha visto que así sea.
Si ex presidentes municipales y ex funcionarios estatales de los entes fiscalizables han incurrido en irregularidades, ¿por qué no hay detenidos?
La fiscal también dice y dice que actúa sin distingos, sin complicidades y alejada de tintes políticos.
Desafortunadamente no se observan avances en cuanto a la aprehensión de quienes incurrieron en daño patrimonial.
Mientras tanto, el daño al erario público que ha sido por años continúa, de acuerdo con el ORFIS y los presuntos responsables siguen libres.
La actual administración estatal está por fenecer y surgen dudas acerca del futuro de Verónica Hernández Giadáns, pues hay quienes cuestionan si continuará al frente de la Fiscalía.
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