Adalberto Tejeda Martínez
A mediados del año pasado escribí un texto sobre las que eran dos probables candidatas a la Presidencia de la República de Morena y del Frente Amplio por México. Siete meses después, la predicción se hizo cierta y dos mujeres buscan ahora ser la primera titular del Ejecutivo en México. Entrado este 2024, veo que mi artículo no perdió vigencia y por eso me permito reproducir.
A finales de los cincuentas fueron recogidas dos conferencias de Max Weber en un libro titulado «Politik als Beruf, Wissenschaft als Beruf». Quizás la traducción más literal sea «La política como profesión, la ciencia como profesión», pero Alianza Editorial lo publicó en español veinte años después con el nombre engañoso de «El político y el científico». Engañoso porque no trata realmente sobre esa relación mal llevada –al menos en nuestro medio– sino que se centra en las vocaciones y perspectivas profesionales de los economistas alemanes de inicios del siglo XX que aspiraban a dedicarse a la política o a la vida académica.Como sea, el libro condensa las principales tesis de Weber.
Ahora buscan ser candidatas a la presidencia de México una física investigadora con licencia del Instituto de Ingeniería de la UNAM, Claudia, y una ingeniera que ha sido exitosa promotora del desarrollo rural y los edificios inteligentes, Xóchitl. Inevitablemtne traen a la memoria dos nombres: una física que ostentó los cargos de secretaria de turismo y amiga cercana del presidente López Portillo, Rosa Luz Alegría, y Angela Merkel, canciller o primera ministra alemana entre 2005 y 2021.
Ángela nació y vivió en la Alemania Democrática (RDA) hasta la caída del muro de Berlín. Militó en las juventudes comunistas, y como doctora en Física fue integrante de la Academia de Ciencias de la RDA. La caída del muro la acercó al entonces canciller Helmut Kohl y se fue cargando a la derecha hasta ser la líder de los Demócrata-cristianos de la Alemania unificada de 2000 a 2018. Ha sido quizás la canciller más exitosa de la Alemaniade la posguerra, tanto o más que el socialdemócrata Willie Brandt. Fue central en el nacimiento y el mantenimiento de la Unión Europea, y sus políticas, pragmáticas y sensatas, fueron más sociales que las de los socialdemócratas, tan ambientales como las de los Verdes, y tan neoliberales como las de su propio partido, conjunción que pudo efectuar porque no la movió la ambición del poder sino un impulso emprendedor y conciliador con eficacia y eficiencia, su antiguo gen de doctora en Física.
No es seguro que C o X (citadas sean en estricto orden alfabético) lleguen a ser candidatas de sus respectivos movimientos políticos. Tampoco que tengan un gen similar al de la Merkel; aunque si contendieran por la presidencia C y X tal vez atenuarían el ambiente machista que prevalece enlos altos niveles de la política nacional. No obstante, debe destacarse una diferencia entre C y X: mientras que la primera obtendría la candidatura merced a su fidelidad al líder, la segunda la conseguiría por méritos propios y a pesar de los líderes de los partidos que habrían de postularla.