Felipe de Jesús Fernández Basilio
Desde a Janela
“Ya solo restan cuatro meses y veintiocho días para que se vaya a … su rancho”
El último fin de semana se llevó a cabo el segundo de tres debates que están programados por el INE para los candidatos a la presidencia de la república.
Este debate llegó cuando falta un mes para la culminación del periodo de campañas, lo cual significa que es un momento de mayor urgencia para todos sus participantes, razón que hizo que los tres apretaran más, claro, de acuerdo a sus capacidades, y su nivel necesariamente fue mejor que el anterior, puesto que los intervinientes se conocieron en el primero.
Y ¿Qué fue lo que vimos?
Bueno, respetando el método que se utilizó en este espacio al comentar el primero, iniciamos con Álvarez y ocupamos su primer, y no publicitado, apellido porque representa plenamente la ignominia a la que Dante, Samuel y su pandilla están condenando a un partido que en algún momento pareció ser de oposición.
Sin embargo, en este momento su candidatura francamente está de más y luego del primer debate en el que consiguió hacer su gracia y salir en televisión nacional, debió de haberse retirado de la contienda y así honrar la calidad opositora de su partido.
Ya que MC ha quedado en donde no debe de estar (de esquirol) y también en donde su líder nacional quisiera estar (en la coalición oficialista) ya que, de estarlo sin trucos, sería su muerte como partido político debido a que perdería a sus electores que son de vocación opositora al régimen.
Aquí hago breve un paréntesis, la excusa de Dante Delgado para actuar así es una supuesta apuesta para obtener una mayor votación por cuenta propia que como parte de una coalición; experimento que desde luego es válido, sin embargo, el problema es que cuando el país está dividido entre democracia y autoritarismo, toda opción política necesariamente tiene que escoger una de esas dos posturas; con ello se demuestra que en realidad Dante Delgado busca beneficiar al autoritario, tal y como lo hizo en el 2021 al permitir, con su postulación independiente, que el oficialismo tuviera una mayoría en la cámara de diputados que no obtuvo en las urnas.
Esperemos que esta vez no le salga su jugada de apoyo disfrazado al gobierno; y por ello quiero dejar muy claro que, al menos en esta ocasión, votar por Movimiento Ciudadano es lo mismo que no votar.
Ahora bien, entrando con las candidatas que realmente disputan la presidencia, vimos a una Xóchitl Gálvez que se repuso a las críticas sobre su desempeño en el primer debate y con ello devolvió el entusiasmo que muchos de sus seguidores, principalmente los miembros de los partidos que la postulan, habían perdido.
En este debate fue una candidata que desarmó el principal ataque de su adversaria al asumir, sin pena alguna, que también es candidata de los tres partidos que la registraron y que representarlos no es nada malo, y con ello puso en evidencia la principal mentira que ha difundido el gobierno en estos cinco años que consiste en señalar a los partidos de oposición como entes corruptos y malos “per se”, cuando la realidad es que ningún partido es corrupto o malo por sí mismo ya que solo son un membrete, los que sí pueden serlo son algunos de sus miembros y curiosamente muchos de los que lo fueron, ahora son candidatos de MRN.
También vimos a una Xóchitl que desempeñó a cabalidad el papel de una oposición que busca ser gobierno y lo hizo a través de cuestionamientos breves, concisos y fundamentados que obligaron a la candidata oficialista a hacer malabares para intentar defender lo indefendible.
Por último, en Xóchitl apreciamos la que, con toda certeza lo digo, es la principal cualidad presidencial: aprender de los errores, aceptar las críticas y enmendar lo que se tenga que enmendar; todo lo contrario, al mal gobernante saliente que sus principales errores los cometió por su tozudez y por su ausencia de diálogo, y su candidata va por el mismo camino.
Y de Sheinbaum, no hay mucho que decir, siguió su mismo guion de pretender dar clases sobre las supuestas virtudes del gobierno saliente y con ello, se ganó el que le llamaran “mentirosa serial”.
Así mismo, demostró que carece por completo de personalidad propia, ya que se desgastó demasiado defendiendo algo que, como candidata, por muy oficialista que sea, no le corresponde; un candidato siempre tiene que observar errores del gobierno que termina y buscar mejorarlos ya que, de no hacerlo, no sirve como candidato.
Por último, respecto de Sheinbaum y su falta de personalidad es de suma importancia advertir que está muy demostrado por la historia de la humanidad que cuando alguien que toda su vida ha sido la de ser un siervo, cuando de la noche a la mañana se convierte en el amo pierde toda noción de la realidad y es capaz de cometer las peores locuras; ejemplos de ellos hay muchos y por ello, es importante reparar en esto antes de dar el voto en favor de ella.
En conclusión, vimos un segundo debate mucho mejor que el primero, hasta su organización fue mejor, y nos queda el final, el cual estoy convencido que será el mejor y el que quedará en la memoria de los votantes por estar a solo dos semanas de la elección.
felfebas@gmail.com Twitter: @FelipeFBasilio