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    Las plantas tienen sed; el Chicalaba, el Fresno, el Roble y el Jinicuil, tienen sed y el hombre también, pero esta sed no se sacia con el agua, su sed va más allá; es una sed de conocimiento, de comprensión, de armonización con la tierra y el universo, las plantas exigentes ser parte del futuro de la humanidad.

    El pasado 15 de junio, en el Parque Temático “Senderito del Bosque de Niebla”, ubicado en la cara oriental de la Reserva Ecológica Cerro de las Culebras, nos dimos cita un nutrido grupo de ciudadanos, preocupados por la crisis ambiental que se está viviendo en estos tiempos. El motivo de este encuentro, fue participar en el 2do. Taller de Introducción y restauración del Bosque de Niebla, en esta ocasión con la presencia del Ing. Agrónomo Arturo García, que nos brindó de forma práctica y amena, sus conocimientos sobre agroecología y la agricultura bio-dinámica, para sembrar con conocimiento y en sintonía con la naturaleza y el ritmo cósmico.

    Como en casi todos los talleres, este pequeño pero nutrido grupo fue multidisciplinario, aunque con mayor índice de docentes de diferentes regiones de Veracruz e incluso del extranjero: como el Maestro Miguel Yoval Torres, a cargo de alumnos de secundaria vespertina y la Mtra Emma de kínder de Alabama.

    Cuando uno entra al bosque o selva, el suelo siempre está cubierto por una espesa capa sobrepuesta de hojarasca en diferente grado de degradación. Ésa misma condición la trasladamos a los arbolitos trasplantados la zona que corresponde a la Rizosfera es conveniente para el bienestar del árbol que el suelo a su alrededor este cubierto con residuos vegetales.

    Se puede arropar al suelo con hojarasca, paja, pajilla proveniente del café. Nos explicó el Mtro. Arturo, mientras revisábamos a los arbolitos nativos sembrados y escogió un Arce Negundo, para explicarnos como en que consiste la Rizosfera y  podemos mejorar paulatinamente esa cobertura del árbol. Se le pueden sembrar en la zona de goteo plantas benéficas como leguminosas que pueden actuar como verdaderos abonos verdes. Establecemos una asociación de coberturas vivas sembrando Canavalia ensiformes en la periferia de la Rizosfera, formando un hexágono que crecerá verticalmente en forma de mata y Cacahuatillo Arachis pintóy, como planta de cobertura de hábitos rastreos que se extenderá horizontalmente cubriendo el suelo. Esta práctica que nos aconsejó el Maestro Arturo, es una fantástica herramienta para frenar el acercamiento del pasto estrella a las raíces del arbolito en crecimiento, ese terrible pasto estrella que hemos estado combatiendo por más de dos años, desde el inicio del Parque Temático, en que estaba todo cubierto “de esa manera como ambas son plantas donantes, fijarán Nitrógeno de la atmosfera a través de las bacterias que viven en simbiosis en sus raíces”, explicó pacientemente el Mtro. Arturo y como resultado: aumentamos la fertilidad del suelo, evitando la erosión, conservando la humedad y favoreciendo la actividad microbiana.

    Después de la práctica, se adoptaron dos arbolitos nativos, dejando pendientes otros, que se sumarán al proyecto comunitario de conservación y agotados por el candente sol, cerramos contentas muy agradecidas, con un círculo de reflexión, ya que la mayoría éramos mujeres, situación que se repite en casi todos los talleres, que se han realizado, tal parece que será nuestra terea; difundir a las próximas generaciones, la importancia de proteger nuestros espacios vitales, “Un Pueblo Mágico como Coatepec, merece un bosque mágico”.