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    Ignacio Alvarez

    Pluma Negra

    La hora del Grupo Metropolitano de Agua y Saneamiento (Grupo MAS) ha llegado. A pesar de la concesión por 30 años para administrar el sistema de agua y drenaje de Veracruz, los empresarios españoles y brasileños que nadie conoce, no cumplieron y al parecer el gobierno ya decidió el retiro del concesión por incumplimiento.

    Fue en la administración de Javier Duarte de Ochoa, cuando los empresarios de Brasil vinculados a Odebrecht con antecedentes de corrupción y sobornos en Brasil y Angola, se unieron un grupo español para crear el Grupo MAS y obtuvieron el respaldo del Cabildo de Ramón Poo y del Congreso de Veracruz para sustituir al Sistema de Agua y Saneamiento ( SAS), quebrado por el ahora diputado electo de MORENA, José Ruiz Carmona.

    Hoy por fin se anuncian auditorías, MORENA como gobierno comprometió en el 2018, la revisión de la concesión, sin embargo, pasaron cinco años y nada, pero en la etapa final del gobierno de Cuitláhuac García se anuncian las auditorias que se encaminan a un virtual retiro de a concesión, después de ocho años de usufructuar el agua en Veracruz.

    Las auditorías técnicas y financieras deberán aplicarse a todo el sistema de tratamiento de aguas residuales, pues las plantas funcionan a medias, el uso de las concesiones de agua y  la infraestructura; a los estados financieros, pues aumentaron los precios de los servicios y no se invirtieron los millones comprometidos; al Instituto Metropolitano del Agua, pues se ha convertido en un elefante blanco con más opacidad que transparencia.

    También se debe auditar al gobierno municipal de Veracruz desde la administración de Ramón Poo y la actual administración de Patricia Lobeira por las millonarias inversiones para beneficio del Grupo MAS bajo el esquema de inversión Pública-Privada que fue concebido el Grupo MAS, para permitir la llegada de empresarios extranjeros a la prestación del servicio… la mala prestación del servicio, pues las quejas se multiplican todos los días.

    Hay que destacar la labor de observancia de la diputada federal Rosa María Hernández Espejo que desde hace seis años mantiene los señalamientos en contra de los manejos de dinero público para el Grupo MAS y del fallecido diputado Local, Fernando Arteaga Aponte que intentó sin éxito llevar el tema del retiro de la concesión a la actual Legislatura.

    Será tarea de los nuevos diputados, fundamentar la serie de irregularidades e incumplimiento del contrato del Grupo MAS para proceder a un eventual retiro de la concesión, además, la nueva administración deberá contar con abogados capaces para librar las querellas que seguramente, iniciará los empresarios para evitar que les quiten su mina de oro.