Destacado

    Manolo Victorio

    Carpe Diem

    Ciento veintiocho historias se entretejen en la política parlamentaria mexicana que se desenrolla en la vieja casona de Xicoténcatl, sede alterna del Senado de la República.
    El compositor Rubén Blades es un párvulo en la narración de historias de las pasiones humanas. Si hubiese nacido en México y no en Panamá, su legado musical hubiese sido tan prolífico como rocambolesco.


    Los alemanes acuñaron el vocablo realpolitik, usado como modelo conceptual para para distinguir las políticas modestas (realistas) de las políticas exageradas.
    La definición de la realpolitik es la política o diplomacia basada principalmente en consideraciones de circunstancias y factores dados, en lugar de nociones ideológicas explícitas o premisas éticas y morales. ​ A este respecto, comparte aspectos de su enfoque filosófico con los del realismo y el pragmatismo, refiere Wikipedia.
    Aquí en México la realpolitik es la preservación de los privilegios pecuniarios obtenidos en el ejercicio del poder público. La ideología, el ideario, las banderas de la lucha romántica por la igualdad, fraternidad y libertad son meros trucos tomados de la revolución francesa para engañar a la masa.
    Los actores son los mismos. Se despedazan solamente en la tribuna, se desuellan en el discurso, se acusan de vendidos, corruptos y demás linduras que sólo se quedan en el atril legislativo, se rasgan las vestiduras en una moral que no tienen en exhibición cruda de la prostitución política.
    Total, el pueblo no importa, sólo es la maquinaria incansable, infatigable en la producción de votos. Nada más.
    Los plebeyos al poder, frase acuñada por Gerardo Fernández Noroña, sólo es una zanahoria discursiva para que el pueblo piense que es protagonista en los cambios del país.
    Craso error.
    El poder legislativo es una mafia donde sus integrantes sólo brincan de un escaño a otro, de una cámara a otra. Son los mismos rufianes que sólo se visten con ropajes rojos, azules, naranjas y magentas.
    Los movimientos son ideados para que el atole con el dedo sea paladeado con el placer sensitivo del engaño no detectado; al contrario, el ciudadano cree que su voto cambiará a este país.
    Miguel Ángel Yunes Márquez votó a favor de la reforma judicial propuesta por el presidente Andrés Manuel López Obrador. Ni la mente más perversa en los quehaceres de la política hubiese bosquejado este voto.
    Quien en sano juicio iba a pensar que los enemigos jurados del presidente Andrés Manuel López Obrador fueran los castores azules para romper el dique del bloque opositor, “en la decisión más difícil de mi vida”, según vociferó, descompuesto en la voz el senador Miguel Ángel Yunes Márquez.
    El bloque monolítico de los 43 senadores de oposición fue infiltrado por un caballo de Troya que cambiará el derrotero de la política donde el patético perdedor se llama Marko Cortés, dirigente del Partido Acción Nacional, sólo es invitado de piedra a los aquelarres donde se tejen los acuerdos, los pactos que dejan fuera filias y fobias y se concentran en la conveniencia política.
    Aquí no fueron los senadores de oposición quienes blandieron los cuchillos hacia los senadores Miguel Ángel Yunes Linares y Miguel Ángel Yunes Márquez, senadores ambos en un mismo día, sino el discurso afilado que se hundió como cuchillo en mantequilla en la alicaída dignidad política de Marko Cortés.
    La narrativa de Miguel Ángel Yunes Linares es que no sólo seguirán en el PAN, sino que buscarán la dirigencia nacional, total, tienen la anuencia benevolente disfrazada de arengas incendiarias del macucón de Palacio Nacional.
    Una jornada bizarra donde el recién asumido senador por unas horas, Miguel Ángel Yunes Linares, dio un discurso escoltado por los morenistas Óscar Cantón Zetina y Félix Salgado Macedonio.
    La creme de la creme de la política actual. ¡Que chulada! exclamaría Loret.
    Y mientras nuestros parlamentarios desnudan sus propias miserias humanas cubiertas con finos trajes Ermengildo Zegna, Hugo Boss, Kalvin Klein y Vittorio Forti, la sociedad se asemeja al clásico meme de John Travolta sacado del filme Pulp Fiction, donde el actor encarna al personaje Vincent Vega, cuando voltea, confundido en paneo de 180 grados, gabardina en brazo, buscando personas en un salón vacío.
    A contrapelo de una lógica tan descabellada como mexicana donde la realidad se pierde en los discursos incendiarios de los senadores, el rociado de gasolina a los ojos del senador Luis Donaldo Colosio Riojas y la extraña ausencia del senador Daniel Barreda (MC), cuyo padre fue detenido por la fiscalía anticorrupción de Campeche.
    La casona de los famosos México, el verdadero reality show que empaña, lava y oculta la guerra sorda que se engendra en Culiacán, Sinaloa, en este descabezadero de liderazgos provocado por la detención del mítico Ismael “El Mayo” Zambada García y Joaquín Guzmán López, “El Güero”, cuarto hijo de Joaquín Guzmán Loera.
    La votación final: 86 votos a favor, la consecución del senador 86 fue, contra toda la ortodoxia morenista, fue el voto en positivo de Miguel Ángel Yunes Márquez. Los opositores se quedaron disminuidos en 41 sufragios en contra.
    En su Política Zoom, intitulada “Yunes será el traidor” del lunes 09 de septiembre, el columnista Ricardo Raphael vaticina un ramalazo que chicoteará en el estado de Veracruz en el futuro inmediato:
    “Adán Augusto (López Hernández) se comprometió a respetar el dominio político de la familia Yunes sobre los municipios de Veracruz y Boca del Río, donde el PVEM serviría como vehículo para promover las futuras candidaturas políticas propuestas por el clan”.
    Los sueños de construir un futuro a base de esfuerzos donde los plebeyos y plebeyas que pueblan la Nueva Jerusalén política del reino noroñista, puedan acceder a otras posiciones de poder en las alcaldías que se jugarán en el 2025, empiezan a traspasar la 5ª. fase REM y empiezan a desdibujarse en una pesadilla donde los dinosaurios azules sigan ahí en un cuento macabro en Veracruz donde el segundo piso de la transformación se construirá con tabiques azules.
    Los plebeyos no entienden la política. Son solo adobes en el muro de una política Pink Floydiana donde los actores y actrices morenistas son simples «ladrillos en el muro», donde se desatiende su individualidad y creatividad.
    … del mismo costal.
    Y esta carambola legislativa que impacta al estado de Veracruz, quien encontró involuntariamente un resquicio para recuperar la dignidad perdida, fue José Francisco Yunes Zorrilla, ex candidato de la alianza Fuerza y Corazón por Veracruz (PAN-PRI-PRD).
    Antes del voto decisivo del cachorro Yunes, Pepe Yunes fijó postura respecto al voto decisivo que alcanzó la mayoría calificada en el Senado.
    “Comparto la indignación de quienes se sienten traicionados con el voto de @YoconYunes (Miguel Ángel Yunes Linares) contra el PJF. No lo entiendo. Hicimos frente para contener a Morena. Había que honrarlo con coraje. No hacerlo es traicionar la confianza de mucha gente Reitero mi firme oposición a este atraco”.
    Por lo menos fui un atisbo en la política virtual de las redes sociales para desmarcarse de los otros Yunes.
    En esta pelotera, ahora sólo habrá que esperar otra noticia descabellada. Quizá el arribo de empresario Arturo Castagné Couturier a la Fiscalía Anticorrupción en el estado de Veracruz de Ignacio de la Llave.
    Nada está dicho, diríase a contrapelo del viejo comercial de los cigarrillos Benson and Hedges
    columnacarpediem@gmail.com