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    Vicente Luna Hernández

    ¿En serio el PRI es un pardo desahuciado políticamente? ¿En serio de ser gobierno 2010-2016 pasó al basurero de la historia? ¿Es Alejandro Moreno el salvador del partido en Veracruz? ¿Tanto es su poder? ¿Dónde están todas y todos aquellos beneficiados política y económicamente bajo las siglas del PRI? ¿Qué piensan las militancias – poca o mucha – de cada uno de los 212 municipios del Estado? ¿Solo están a la espera de las indicaciones que salgan del Comité Estatal o Comité Nacional? ¿Es la actual dirigencia en Veracruz la indicada para el momento actual del partido? ¿En serio le conviene a Alejandro Moreno una dirigencia pasiva, cómoda, solo a la espera de sus indicaciones? ¿Quién gana con el PRI perdiendo?

    La realidad es que por primera vez en Veracruz el partido debe llevar a cabo una verdadera revolución interna, pensar que haciendo lo mismo que lo llevó a perder el poder en el Estado dará resultados diferentes es creer en los Reyes Magos, hablar de sectores del partido es burlarse de la militancia, lo cierto es que sea quien sea el o la presidenta debe tener un discurso más apegado  a la realidad social de Veracruz, el partido está desdibujado en gran parte del territorio estatal y la dirigencia trae otro discurso muy ajeno al sentir de la militancia y de la sociedad en general, hay hablarle a los ciudadanos que no apoyaron a la alianza oficial pero también dejar en claro y de manera franca, que ofrece el partido a todos los sectores de la población, ¿por qué apoyar al PRI?

    Una de las medidas principales debe ser transparentar los recursos que ingresan a las arcas partidistas, la militancia tiene derecho a saber en qué se gastan los recursos del partido, los privilegios de las élites del partido deben ser parte de un pasado que avergüenza a la sociedad, la llegada del dirigente del partido a un municipio y esperar toda la parafernalia del ayer es ofensivo para esa militancia que – por lo regular está abandonada por sus dirigentes, ¿qué parte del mensaje del pasado 2 de junio no se entendió? 

    Lo importante no es cuantos hay en el comité estatal sino cuantos realmente – más allá de esperar su quincena – están dispuestos a invertir más tiempo y esfuerzo y menos discursos, quienes realmente representan un liderazgo o tienen la credibilidad para convencer a la sociedad, quienes realmente están comprometidos con el proyecto de partido opositor o solo están a la espera que les tiren unas “señales” desde palacio de gobierno y piensan correr como dóciles corderitos, ¿en serio no hay liderazgos partidistas más allá de la actual dirigencia estatal?

    Todo partido vive de los votos, a más votos más recursos económicos, tal parece que a la dirigencia nacional no le interesa la militancia activa, participativa, critica, revolucionaria sino todo lo contrario, cree que con lo que tiene le alcanza para sobrevivir el 2025 y esperar que la población se desilusione con el gobierno federal y estatal para ser opción, ¿tiene el PRI algo que ofrecer al pueblo de México? ¿Son las y los presidentes municipales el verdadero factor de poder al interior del PRI?

    Las autoridades electorales ya dieron su última palabra con relación a las reformas que llevó a cabo el PRI en sus documentos básicos, la disidencia tendrá que tomar sus maletas e irse a otro lado, engrosar las filas de otro partido o sumar esfuerzos para constituir una nueva opción política, ¿tendrán la fuerza social suficiente para semejante tarea? ¿Serán los que siempre – o casi siempre – fueron plurinominales los líderes que espera y busca la militancia inconforme con la dirigencia nacional?

    El desempeño desde el Congreso de la Unión de las y los legisladores del PRI, el desempeño de los diputados locales – sean 2 o sean 3 – y los resultados en el ejercicio del poder de las y los alcaldes emanados del tricolor, serán punta de lanza del resurgimiento o esbozo de rebelión de la oposición para que la sociedad voltee hacia las filas el partido, no se trata de ser una oposición a ciegas, se trata de señalar con argumentos los errores y excesos en el ejercicio del poder desde la presidencia de la república y en su momento, desde palacio de gobierno, es cierto, la votación se perderá en el pleno pero la discusión y el debate lo deben de ganar o dar la batalla en otros medios de difusión, los medos de comunicación libres serán aliados de ese debate que debe darse en las calles y en todo momento, ¿a quién le hace daño la democracia participativa? ¿A quién le hace daño la revolución de las conciencias en todo momento?

    P.D.- Con el ánimo que haya un buen gobierno pero también una buena oposición…Escribiré otro día.