Destacado

    Javier Duarte
    Salvador Muñoz

    Los Políticos 

    La primera vez que leí sobre la Renuncia de Javier Duarte fue cuando salió a relucir “el Oro Molido” de Salvador Manzur en los videos que vinieron a echar abajo el trayecto político del entonces secretario de Finanzas. El tocayo se veía como el probable sucesor de este gobierno que en ese entonces, a medio camino, ya estaba envuelto en la polémica por ese escándalo electoral que decían los muchos, puso en riesgo el Pacto por México de Peña Nieto y los partidos, pues estos últimos demandaban Juicio Político para la titular de Sedesol, Rosario Robles y Javier Duarte de Ochoa.
    Al final, no hubo tal… pero sí cayeron dos cabezas: la de Ranulfo Márquez, delegado de Sedesol, y la del secretario de Finanzas, Salvador Manzur.
    ¿Y qué pasó? Realmente nada…
    El PRI obtuvo en esas elecciones mayoría en el Congreso local; ganó un buen porcentaje de municipios y al cabo del tiempo, Salvador Manzur fue nombrado delegado en Banobras en el estado y Ranulfo Márquez es actualmente titular de Sedesol en Veracruz.
    II
    ¿Se acuerdan del Hashtag #HastaQueRenuncieDuarte? Eran principios de 2014. Periodistas, reporteros, columnistas y toda la fauna media se convulsionaba primero, con el homicidio de Goyo Jiménez; después, con el móvil de su deceso. Entonces, periodistas del país exigieron la renuncia del gobernador de Veracruz, Javier Duarte y a través de Twitter, se expresaron con ese hashtag: #HastaQueRenuncieDuarte.
    Y si se agrega que a mediados de ese año, por julio, 30 miembros del Consejo Supremo de Pueblos Indígenas se manifestaron en la Plaza Lerdo exigiendo la renuncia de Javier Duarte ante la falta de capacidad para resolver sus problemas. Demandaban una indemnización por la expropiación de 975 hectáreas en Soteapan, reubicación o apoyo para las familias que se quedaron sin tierras.
    ¿Y qué pasó? ¡Quién sabe! Desconozco si a estos indígenas los indemnizaron, renunciaron a su lucha o los plancharon… lo único cierto es que Duarte no renunció.
    III
    Quizás haya más historias al respecto sobre la renuncia de Javier Duarte, pero la más reciente es la de Miguel Ángel Yunes Linares, lo que entrecomillo: “Los veracruzanos vivimos la crisis de la crisis, es decir, la peor situación de la historia en nuestro Estado, no sólo en seguridad pública, sino también en pobreza, desempleo, bajos salarios, y una corrupción que brota en cada punto del gobierno estatal que se toca. No debemos esperar a que la situación se torne peor, si es que pudiera ser peor. Javier Duarte debe reflexionar y retirarse del cargo, para que lo sustituya alguien, aún de su propio partido, que trate de enderezar un barco que se está hundiendo… Si Javier Duarte tuviera vergüenza ya habría renunciado”.
    Pero hasta el momento, no ha renunciado.
    IV
    Se dice que los puestos de elección popular son irrenunciables. Realmente le achacan esta frase a Luis Echeverría Alvarez, por lo tanto, la pudiéramos calificar como “Demagógica” en el mejor de los casos. Por lo tanto, en pocas palabras, Javier Duarte sí puede renunciar si se basa en el Artículo 44 de la Constitución Política local que a la letra dice: “El cargo de Gobernador del Estado sólo es renunciable por causa grave, que calificará el Congreso del Estado”.
    El asunto es resolver qué es una “Causa Grave”.
    La primera que me viene a la mente es que Javier Duarte cometiera un delito grave que imagino como Homicidio Calificado o hasta vinculación con el Crimen Organizado. Si nos ubicamos en la percepción ciudadana, se pudiera acusar al Gobernador con varias acepciones que pueden caer hasta al insulto. Yunes Linares lo concentra en la situación financiera y de inseguridad que vive el estado. En términos éticos y morales, es válido pedirle la renuncia. En términos políticos, es llevar agua al molino. No es lo mismo que un padre de familia clame la renuncia a que un político lo haga.
    Pero, ¿qué tanto resolvería la renuncia de Javier Duarte la condición económica y de inseguridad que vive el estado? ¿O la renuncia del Fiscal y del secretario de Seguridad Pública? Yo creo que en nada… sólo descansarían las vísceras de muchos o buscarían otro personaje en quién depositar su bilis.
    Si en realidad la gente quisiera un cambio, un verdadero cambio, saldría a votar. Pero el millón y cacho que eligió a Duarte por encima de Yunes tiene menos culpa de lo que hoy se vive en Veracruz, que el resto que se quedó en casa sin ejercer su derecho a elegir.
    Así, puede haber más y más peticiones de renuncia, y al final, como siempre, no pasará nada… a menos que “enfermen” a Duarte.
    (Ya sobre la petición de renuncia del secretario de Seguridad Pública o el Fiscal, será un tema a tratar mañana).

    smcainito@gmail.com

    Hacer Comentario