Pobreza y analfabetismo: “oro molido”

Ricardo Vázquez Salazar

Esfera Política

Sinceros deseos de pronta y total recuperación de salud para nuestro amigo Noé Valdés. Un afectuoso abrazo.

Las elecciones del pasado domingo arrojaron una vez más datos interesantes, que de alguna manera confirma lo que ya se había señalado: la pobreza y el analfabetismo representan dos fenómenos complejos, instrumentos fundamentales en una contienda electoral.

En la actualidad basta observar los distritos en los que el PRI ganó y perdió, para darnos cuenta que la polarización socioeconómica de las diferentes regiones; de una zona urbana a una rural, son un factor determinante que genera y se refleja en el número de votos.

La encuesta realizada por Parametría publicada en el diario El Financiero este miércoles, menciona entre otras cosas que el grupo más bajo de votantes del PRI fue el del rango de entre 18 y 25 años (21%), según la encuesta realizada el día de la elección. En cambio, 40% tenía 56 años o más.

La tendencia indicó que a menor escolaridad, mayor captación de votos tiene el PRI: 49% de los encuestados fue agrupada en la sección «Sin Escolaridad», mientras que solo 24% tenía «Universidad». Según los datos publicados en el diario.

Al respecto, uno de estos casos, palpable directamente es el del distrito 8, Xalapa Rural, en que el electorado que no aceptó soborno para votar, afirma que hoy se explican por qué razón los niños y jóvenes veracruzanos en muchos lugares toman clases a la intemperie, en improvisadas barracas, o debajo de los árboles por carecer de aulas apropiadas; la explicación que ellos mismos se dan es que el ex secretario de Educación en Veracruz en los últimos cuatro años, Adolfo Mota Hernández, hoy diputado electo por ese distrito, despilfarró grandes cantidades de dinero durante su campaña para poder ganar la elección; con los recursos que estaban destinados al sector educativo, que hoy la Auditoría Superior de la Federación, ASF, tiene identificado con numerosas irregularidades por miles de millones de pesos.

La pregunta que se vuelve a hacer la población es ¿qué va hacer Adolfo Mota como legislador federal por segunda ocasión? Si como secretario de Educación en Veracruz en la presente administración estatal tuvo en sus manos la oportunidad de hacer un trabajo digno en beneficio de niños y jóvenes, e hizo todo lo contrario; su desempeño ha sido calificado como el peor secretario de Educación que ha tenido Veracruz; el rezago educativo se agudizó en esos cuatro años en base a datos del INEGI; la infraestructura educativa no registró ningún avance y el caos sigue imperando entre el gremio magisterial.

Son los privilegios de la impunidad, hasta otorgar el fuero para cerrar con broche de oro un ciclo.

Esta situación se había apuntado con anterioridad con toda certeza. A un mes de haber iniciado su pontificado, en el mes de abril de 2013 el Papa Francisco puntualizó: “A la gente la empobrecen para que luego vote por quienes los hundieron en la pobreza”. Cuánta razón. Cuanta perversidad.