Cárceles invadidas por corrupción

Mónica Camarena Crespo

Parque Juárez
A raíz de la que sigue siendo la penosa segunda fuga de Joaquín Guzmán Loera “ El chapo “ de penales presuntamente de máxima seguridad en México, es que se reabre el debate del sistema penitenciario y todo se encamina a una sola conclusión, obsoleto e invadido por la corrupción.
En todos los niveles en nuestro país, en materia penitenciaria se registran focos rojos permanentes; en estados tratan de ocultar las deficiencias, los negocios, las cajas chicas que se vuelven las cárceles, la barbarie misma.
Sin embargo, ningún gobierno ( ni local ni federal ) ha dado señales de querer poner orden en el tema; es más fácil irse pasando la bolita cada sexenio, con el argumento que no hay dinero que alcance.
Quienes son asignados como directivos en cárceles, dependiendo el nivel, saben el riesgo que corren; aunque no participen en caso de alguna fuga, son los primeros en ser detenidos para la investigación.
Por ello, la consigna es que mejor saquen provecho mientras ejerzan cualquier puesto, porque la suerte les cambia a veces de un día para otro.
No se duda que haya gente que trabaje en penales y que sea honrada, pero los expedientes probados arrojan penosas cifras en materia de corrupción.
Tan solo en Veracruz, se siguen registrando fugas. Se confirmó a cuenta gotas, que durante el pasado viernes se registró la fuga de un reo de “El Penalito” de Playa Linda y ante esta situación había sido cesada su directora, Sarahí Prieto Galaviz.
Lo que trascendió, es que la ex directora será sujeta a investigación y lo que toca al reo que se fugo, pues por el momento ya goza de libertad; el sujeto había sido procesado por delitos como robo y lesiones.
La corrupción dentro de las cárceles es conocida por todos, no se ocultar y se ejerce con total descaro; venta de comida, alcohol, comodidas en las celdas, hasta la entrada de mujeres que por desgracia son contratadas para entretener por un rato a los presos.
En un penal, el que paga vive menos peor; el que no paga, se la pasa todavía peor. El privilegio se rige por la cantidad de billetes y el nivel del preso.
En una requisa salen a relucir hasta armas, lo más usual, el uso de celulares; los “ moches “ para los custodios son elevados si es que se quieren privilegios.
Son tristes y vergonzosos los relatos de las familias que tienen en la cárcel a algún pariente; si no cuentan mínimo con 10 mil pesos mensuales para su seguridad, saben que se corre el riesgo por la vida del que esta adentro.
Urgen medidas para modernizar los sistemas de rehabilitación social; los excesos hasta en esos casos, son apabullantes.

Ágora
Salvo los cercanos, aquellos a los que ya no les queda de otra, creen que habrá poder de decisión para seleccionar al candidato del PRI para la de 2 años; desde el centro, lo que más les preocupa no es a quien impulsan desde acá, sino quien puede ganar porque las encuestas y sondeos arrojan muy malas noticias para los tricolores.
Hay temor hasta de quien vaya de candidato de MORENA, ya ni siquiera el PAN es única oposición en el estado.
@monicamarena