La disciplina no es unidad

Luis Romero Herrera
Hora Cero

En el PRI de Veracruz, la división de los grupos internos es más profunda de lo que parece; la sesión del Consejo Político para nombrar a presidente y secretaria general del Comité Directivo Estatal del partido no fue el evento de unidad que hubiera deseado la dirigencia nacional.
Manlio Fabio Beltrones acudió al evento en su calidad de presidente del Comité Ejecutivo Nacional y si bien la presencia del senador Héctor Yunes Landa podría interpretarse como la convalidación de la llegada de Alberto Silva Ramos al máximo cargo de representación formal del tricolor en la entidad, la realidad es que el de Soledad de Doblado estaría cada vez más lejos del grupo en el poder y cada vez más cerca de la posible alianza PAN-PRD e, incluso, de la candidatura independiente.
A pesar de que desde hace una semana, Yunes Landa manifestó su rechazo a la llegada del diputado federal por el distrito de Tuxpan a la dirigencia priista en Veracruz, el senador estuvo en el evento; su cercanía con Manlio Fabio Beltrones Rivera determinó su asistencia.
En un acto de congruencia política, el otro senador del partido, José Francisco Yunes Zorrilla, prefirió no asistir, a pesar de que ya se había anunciado su presencia. Cuando se filtró a los medios la inminente llegada de Silva Ramos al CDE, el primero en oponerse fue Pepe Yunes; este sábado, su asistencia al evento se hubiera observado como un criticable acto de incongruencia.
De Manlio Fabio tampoco se esperaba un discurso diferente; convocó a la unidad y a construir un proyecto incluyente, en el que todos tengan espacio y cabida.
De igual manera, el sonorense instó a los senadores Héctor y Pepe Yunes a cerrar filas por la unidad del partido.
En ese mismo sentido fueron las palabras del gobernador Javier Duarte de Ochoa, quien ponderó la unidad como una herramienta, dijo, para promover el desarrollo y el crecimiento del estado. Asimismo, el ejecutivo veracruzano apuntó que los resultados electorales reflejan la confianza de los ciudadanos en el PRI y que la estructura del partido está fortalecida, es ganadora y tiene la disposición de mantener el liderazgo político en Veracruz.
El discurso de Alberto Silva pasó de lo ocurrente –con el juego de palabras en el sentido de que en el partido no hay veto para nadie y sí Beto para todos– al elogio excesivo, cuando se refirió al liderazgo del gobernador; y de ahí a lo reiterativo al hacer un llamado a la unidad partidista.
El problema es que para el grupo que llega a la dirigencia priista, que es también el que se encuentra en el gobierno estatal, la única unidad que vale es la que se construye en torno a la continuidad; ese es, en el fondo, el motivo de las diferencias con otros actores de la vida política veracruzana.

Silva Ramos se queda con el membrete del PRI
Silva Ramos adelantó que su comité se caracterizará por una postura dura, frontal, directa e implacable con los adversarios, y cercana a los militantes del PRI.
Por lo demás, nada nuevo el tricolor: disciplina de las viejas caras del partido, cada vez más desgastadas; y mucho acarreo, movilización es el eufemismo que ocupan hoy.
Sin duda, “unidad” es la palabra más repetida por los dirigentes del PRI en Veracruz y en el ámbito nacional; y ese es, precisamente, el concepto que menos prevalece al interior del partido: Yunes Zorrilla no asistió al evento y Héctor Yunes lo hizo bajo protesta.
Al final, Alberto Silva se quedó con el membrete del tricolor. Veremos en un par de meses, si eso basta para alcanzar la candidatura y ganar la elección.
Por otro lado, el del sábado no fue un evento de unidad partidista ni de reconciliación entre los grupos; fue, en todo caso, un acto de disciplina priista.

Importantes obras en Xalapa
Está comprobado que las grandes obras son también aquellas intervenciones puntuales que la población siente en su vida diaria, en sus recorridos; el gobierno de Américo Zúñiga Martínez ha emprendido en las últimas semanas un ambicioso programa de sustitución de losas fracturadas en calles del centro de Xalapa que eran verdaderamente intransitables.
Con esta estrategia para mejorar la movilidad urbana han quedado reparadas las vialidades de Altamirano, Revolución, Sayago, Melchor Ocampo, Cuauhpopoca, Bustamante, Manuel Doblado, Diego Leño, Avenida Xalapa, 20 de Noviembre y Avenida Américas, las cuales suman 4 mil metros cuadrados de concreto renovado que se traducen en el mejoramiento de la movilidad urbana y de la ciudad.
Se trabaja también en la calle de José María Mata, entre Zamora y Zaragoza, donde además de reconstruir el pavimento se considera la sustitución del sistema de drenaje y la red de agua potable. Estas obras se suman al paquete de calles con concreto hidráulico que se han hecho en las colonias y congregaciones, además de la modernización de la infraestructura hidráulica y sanitaria, así como los puentes vial de Las Cumbres y ciclopeatonal de la zona universitaria que vendrán a resolver y fortalecer la infraestructura vial, y que avizoran un cierre de año con grandes obras en Xalapa. @luisromero85