Marco Antonio Aguirre Rodríguez
Místicos y Terrenales
Apúntelo, por si se da la ocasión.
Pepe Yunes se pronunció en contra de “los moches” que algunos funcionarios públicos piden para tramitar u obtener recursos.
Dijo que nunca ha incurrido en esa práctica y que no piensa hacerlo.
¡Apúntelo!. Por si le sabe algo, le pueda reclamar.
Lo dijo durante su tercer Informe de labores legislativas, frente a un auditorio de más, mucho más de 11,000 personas que estaban en el World Trade Center, en el salón donde fue el evento, más otras ¿5 mil, 10 mil?, que estaban en las afueras del recinto.
Vaya, pues, hay miles de testigos.
Pepe Yunes manda un mensaje de que es honesto, aún andando entre lobos que saben aullar en diferentes tonos.
Tampoco dio muestras de haber claudicado en sus posiciones de crítica y reclamo contra el gobierno del estado, y lo hizo teniendo enfrente a un Javier Duarte que estuvo con la vista fija en el Senador que se dirigía a esas multitudes dispersas por el estado y ¿por el mundo? (puede ser), por la transmisión que se hizo por internet del Informe.
“Tenemos posiciones encontradas. Son públicas ciertas diferencias. Y sin embargo, sabemos en el Partido Revolucionario Institucional convivir, coexistir y encontrar salidas. Sin renunciar, sin claudicar. Pero siempre teniendo, con firmeza, claridad en qué es lo que vale la pena atender”.
Pero también reiteró que “no hay -bajo ninguna circunstancia- posicionamiento contrario a lo que significa el bienestar de Veracruz”.
Y como si fuera lema de campaña puntualizó, y sus palabras fueron aplaudidas por su público: “Veracruz es el que nos llama, Veracruz es el que nos convoca”
Fue un Javier Duarte que llegó al World Trade Center abriéndole paso a Pepe Yunes.
“Pepe es el bueno… Pepe es el bueno”, brincaba una mujer con facha de lideresa de colonias, agitando la cabeza de un lado al otro, remarcando en un “te lo dije” implícito dirigido a las otras mujeres con las que estaba.
“Duarte vino a darle el espaldarazo… mira, mira”, señalaba la pantalla, donde se proyectaba la imagen de Javier Duarte dándole paso a Pepe Yunes; a un costado Karime Macías, que sonreía.
Héctor Yunes, se concentró en el café de la Parroquia de Plaza Américas y ahí se aglutinó una cincuentena de sus seguidores, que atiborraron los pasillos del centro comercial en su paso.
Y gritaron porras y entraron con alborozo.
11:30 de la mañana y el lugar ya estaba lleno.
Una avalancha empujaba por la puerta principal e ingresó arrasando a los guardias, que retrocedieron, que fueron por vallas, que pedían calma.
La masa humana se desbordó en el salón y se acomodo en los pasillos, porque los lugares ya estaban todos ocupados.
Entre las huestes acomodadas en los lugares para el público en general (porque si hubo un espacio para los invitados especiales), había unas letras “P” gigantes, de color rojo, como signo distintivo.
¿P + P?
Con ese significado repetido por el salón, la porra recorría todos los rincones:
Oe- oe- oe- ooooeeeee- Pepeee – Pepeeee
Eran las huestes llegadas de Xalapa, llevadas por Américo Zúñiga, el alcalde que está entre los generales de Pepe Yunes, tanto que estuvo a un costado del senador.
Eran las 12:07 y Pepe y Héctor entraban al salón; “es una carrera parejera”, decía uno de los simpatizantes yunistas rojos.
Fueron las 12:08 y los senadores se encontrarton con Duarte y con Karime.
Y una porra se escuchó: Dua-rte, Duar-te, con poco eco.
A esa hora empezó la transmisión por internet.
En el discurso José Francisco Yunes Zorrilla, reconoció la desconfianza que la población tiene hacia la clase política “no se necesita ser mentalmente súper dotado, para entender la desconfianza hacia la clase política”, a la cual se “liga indiscutiblemente y a veces injustamente con la corrupción”.
Ahí fue donde se pronunció en contra de “los moches”.
Y reconoció que se padece de una impunidad «rampante» que ofende y lastima, “por razones que no necesitan explicarse”.
También reconoció la zozobra que tiene la población por la inseguridad que se vive, y la contrariedad porque “el sacrificio fiscal del pago de impuestos no siempre se distingue en infraestructura, ni en servicio público de calidad”.
Y en cambio –apuntó- “se multiplican ejemplos de fortunas inexplicables, asociadas al manejo del presupuesto”; seguramente, alguien de los presentes resintió el reclamo como si lo hubiera hecho directo a su persona. O sea, que se puso el saco.
En el auditorio los grupos buscaban espacio para tomarse fotografías que mostraban su presencia en el Informe de Pepe Yunes.
Y de inmediato, en cuanto tuvieron señal, fueron subidas al ciberespacio y comenzaron a viajar por las redes sociales mostrando a quienes se autobalconeaban.
Algunas de esas fotos mostraban el segundo plano que Pepe Yunes tenía, con el escudo del Senado, que incluye el águila parada en un nopal devorando una serpiente.
Al acto llegaron hasta empresarios que no tuvieron el menor empacho en mostrarse como cercanos al senador que también aspira a ser gobernador de Veracruz a partir de diciembre del 2016, como Antonio Chedraui Obeso, Justo Fernández Ávila, Otón Porres Bueno, Domingo Muguira Revuelta, y otros presidentes de cámaras empresariales y directivos de grupos empresariales.
José Yunes también se congratuló porque se encuentre una solución a la falta de recursos que sufre la Universidad Veracruzana. Ahí, estaba el dirigente del sindicato de académicos de la UV, Enrique Levet Gorozpe.
La carrera por la sucesión en Veracruz sigue.
Y cada vez más, por el lado del PRI, parece decir que el candidato, Yunes será.
Este domingo fue el día de Pepe.
¿Un gran místico en construcción?.
Hacer Comentario
Haz login para poder hacer un comentario