Yo Soy UV

Rodrigo Montoya Rivera

Ideas

Nos podemos remontar al 11 de septiembre de 1944. La idea: recoger todas las expresiones educativas, culturales y artísticas de la entidad. Al principio se pensó en un pequeño grupo de escuelas y facultades, todas unidas que pudiesen impartir disciplinas y diferentes materias de forma gratuita a todo aquel que buscara el conocimiento. A estos días, se ha convertido en una de las universidades con uno de los mayores despliegues geográficos de la República, teniendo presencia en más de diez ciudades en Veracruz, así como en cinco diferentes regiones.

Por supuesto, estamos hablando de la Universidad Veracruzana, la cual a sus 66 años de existencia, se ha convertido en “La Casa de Estudios” de Veracruz y de la cual miles de estudiantes egresan al año en cada una de sus 74 facultades y diversos institutos y sistemas de enseñanza, donde constantemente se ven renovados los planes de estudios y los modelos educativos, tal es el caso de más reciente, el Modelo Educativo Integral Flexible, MEIF.

Tan solo hasta el 2014, la Universidad Veracruzana contaba con casi setenta y cinco mil estudiantes, no solo del estado de Veracruz, sino también de diversas partes de la República, y fue con el Gobernador Patricio Chirinos cuando se le otorgó y arraigó su autonomía, fortaleciendo su estructura interna de dirección, así como el seguimiento de los programas educativos más importantes.

Del texto del artículo 10, cuarto párrafo de la Constitución Política del Estado Libre y Soberano de Veracruz-Llave, que a la letra dice: “La Universidad Veracruzana es una institución autónoma de educación superior….tendrá la facultad de autogobernarse, expedir su reglamentación y nombrar a sus autoridades; realizará sus fines de conservar, crear y transmitir la cultura y la ciencia, a través de las funciones de docencia, investigación, difusión y extensión, respetando las libertades de cátedra, de investigación, de libre examen y discusión de las ideas; determinará sus planes y programas; fijará los términos de ingreso, promoción y permanencia de su personal académico; y administrará libremente su patrimonio, que se integrará con las aportaciones federales y estatales, la transmisión de bienes y derechos de personas físicas o morales, nacionales o extranjeras los recursos generados por los servicios que preste, así como por los demás que señale la ley”, por lo que su autonomía constituye una de sus mayores fortalezas.

Sin embargo, actualmente la Universidad enfrenta uno de los problemas financieros más importantes de su historia educativa. Existe el litigio sobre un recurso económico, el cual asciende hasta los dos mil setenta y seis millones, correspondiente a partidas presupuestales que debieron ejecutarse desde hace más de dos años, por lo que la Máxima Casa de Estudios, ha pasado momentos difíciles en los últimos meses, razón por las diversas expresiones de solidaridad se han hecho visibles por parte de alumnos, catedráticos, directivos, egresados e incluso estudiantes de diferentes instituciones educativas, a través de las redes sociales y los medios de comunicación.

El recurso financiero que se adeuda a la Universidad Veracruzana, responde a las carencias y demandas de la misma, las cuales se traducen en una mejor infraestructura, en un mayor fortalecimiento de la materia educativa y sobre todo en una aportación sin precedentes a la cultura educativa veracruzana.

La conciencia que deben retomar los servidores públicos involucrados en esta controversia, es fundamental para el desarrollo universitario, pues dicho recurso podría servir también para solventar la tan importante necesidad de abrir espacios para los más de veinte mil aspirantes rechazados, ya que es ésta universidad una de las que más demanda tienen.

La grandeza de la Universidad, recae en los valores y prácticas cívicas que se inculcan día a día en cada uno de sus estudiantes, por lo que apoyarla, en cada una de sus acciones es indispensable para forjar educación de calidad en Veracruz.

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