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    Pentathlon

    Rodrigo Montoya Rivera
    Ideas

    El día de ayer tuve el muy grande placer de asistir por la mañana a la Escuela de Bachilleres “Antonio María de Rivera”, a invitación del Pentathlon en Xalapa, en el marco del Día de la Familia, tuve la suerte de ser testigo de la extraordinaria labor que realizan los comandantes a cargo de muchos jóvenes, los cuales pertenecen a esta agrupación y que desarrollaron actividades deportivas y culturales en compañía de sus familiares.

    Fundando a nivel nacional en 1938 por 12 estudiantes de la Universidad Autónoma de México y un teniente del Ejército Mexicano, surgió como un proyecto de disciplina pero también de recreación deportiva, en la que se encuadraban en aquel entonces, únicamente 5 actividades físicas, las cuáles eran, el box, natación, salto de longitud, carrera de velocidad y carrera de resistencia.

    En Xalapa, fundado por el hoy Presidente del Comité Olímpico Nacional, y ex Presidente Municipal de Xalapa, Carlos Padilla Becerra, el Pentathlon Deportivo Militarizado Veracruzano, agrupa hoy a más de 300 integrantes, la mayoría de ellos jóvenes estudiantes, y entre los que encuentran entrenando algunos desde los 7 años de edad. Más que agrupar jóvenes para practicar deportes, el Pentathlon busca forjar una disciplina de vida, basada en la ética y los valores necesarios para tener un camino de éxito y logros.

    Dentro, se tienen diversos rangos muy parecidos a los que el Ejército ostenta, pues desde su fundación fue uno de los miembros un militar y por lo tanto el honor, la patria y el valor, son una de las características que se inculcan en cada uno de sus miembros, y para acreditar o subir de rango, además de aprobar las pruebas de conocimientos y pruebas físicas, es necesario gozar de una reputación intachable, llevar buenas calificaciones, mostrar interés en las actividades desarrolladas y por supuesto, estar comprometidos con el país.

    Xalapa es uno de los 35 municipios que tienen la dicha de contar con un Pentathlon, pues muchos jóvenes de la ciudad que podrían estar realizando otro tipo de actividades, o siendo víctimas de vicios nocivos para ellos, prefieren levantarse muy temprano e ir a entrenar con sus compañeros, mismos que se han convertido en una verdadera y gran familia.

    Si usted estimado lector, es uno de los interesados en unirse a este gran equipo, puede usted ir a la escuela Antonio María de Rivera, y alistarse en esta gran hermandad; el requisito, tener ganas de superarse y de forjar una verdadera identidad nacional, comprometidos con los intereses de la nación.

    Un ejemplo para todos los xalapeños.

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