Luis Alberto Romero
Hora Cero
Aunque en términos de personalidad, formación y capacidad esos tres ex gobernadores tienen muy poco, casi nada en común, Dante Delgado, Flavino Ríos y Javier Duarte comparten una historia muy parecida: los tres pisaron la cárcel.
En los tres procesos, además, un papel importante jugó el gobernador Miguel Ángel Yunes Linares.
Aunque por distintas acusaciones y en épocas diferentes, esos tres ex mandatarios veracruzanos durmieron o duermen tras las rejas; Dante Delgado gobernó la entidad del primer día de diciembre de 1988 al 30 de noviembre de 1992. Durante el sexenio de Patricio Chirinos, cuando Yunes Linares ocupaba el cargo de secretario de Gobierno, Dante fue preso durante un año y tres meses en el penal de Pacho Viejo, señalado por los delitos de abuso de autoridad, peculado y enriquecimiento ilícito. Al final de esa historia, la prescripción favoreció al sucesor de don Fernando Gutiérrez Barrios. Ese fue el primer ex gobernador veracruzano en convertirse en reo de Pacho Viejo.
Flavino Ríos Alvarado también fue, al igual que Dante Delgado, gobernador interino de Veracruz, aunque su periodo fue mucho más efímero; la pequeña administración de El Chino, como se le conoce en el ambiente político estatal, sólo duró del 12 de octubre al 30 de noviembre de 2016. A poco más de 3 meses de finalizado su paso por el poder Ejecutivo estatal, el 12 de marzo del presente año, Ríos Alvarado fue encarcelado, acusado por haber facilitado los medios, un helicóptero oficial en este caso, para que el ex gobernador Javier Duarte emprendiera la huida del estado y del país; y se mantuviera prófugo por casi cinco meses, más de 150 días.
A Flavino Ríos lo vincularon a proceso para pasar un año en prisión preventiva; sin embargo, el 20 de marzo, una semana después de ser detenido, el ex gobernador interino fue enviado al hospital por una supuesta afectación a su salud y de ahí, a prisión domiciliaria. Fue el segundo.
Javier Duarte de Ochoa es el tercero y más reciente caso de un ex gobernador veracruzano detenido. El pupilo y sucesor de Fidel Herrera Beltrán está en una cárcel guatemalteca, en espera de su extradición.
A Duarte se le señala por los delitos de operaciones con recursos de procedencia ilícita, desvío de recursos federales y delincuencia organizada. Por la gravedad de las acusaciones que pesan en su contra, se dice que a diferencia de Dante Delgado y Flavino Ríos, el cordobés podría pasar una muy larga temporada en prisión.
Por otro lado, no existen antecedentes en el país de un gobernante con tantos señalamientos por actos ilícitos. Javier Duarte, sin duda, pasará a la historia nacional como ejemplo de corrupción; Yunes Linares, como el primero en tener un papel determinante en el encarcelamiento de tres ex mandatarios veracruzanos.
Son, los de Dante, Flavino y Duarte, casos parecidos por el hecho de que los tres ex gobernadores pasaron por la cárcel, pero también muy diferentes por las acusaciones y señalamientos que se ventilan. La mayor diferencia, sin embargo, se observará con el tiempo, porque Delgado Rannauro pudo reinventarse al salir de Pacho Viejo para convertirse en voz opositora a Partido Revolucionario Institucional y fundar un partido político, el Movimiento Ciudadano, un alcance que no tiene Flavino Ríos, y mucho menos Javier Duarte.
Por cierto, entre un sector de la opinión pública prevalece la idea de que el paso de Duarte de Ochoa por la cárcel podría no ser tan largo; en pocas palabras, que el ex gobernador de Veracruz recobraría su libertad al poco tiempo de llegar al país, debido al débil sistema de impartición de justicia. El tema nos recuerda a un ex titular del Juzgado Mixto Municipal de Martínez de la Torre, quien señalaba que “el sistema de justicia de nuestro país es tan perfecto, que si Jesucristo hubiera sido mexicano no lo crucificamos… ¡le arreglamos su asunto!”.
@luisromero85
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