Educación es política

Elena Córdova

Luna Nueva

Con más de 450 mil reproducciones y 10 mil quinientas veces compartido, circula hasta el día de hoy, en redes sociales un video creado y editado (11/07/2017) de la periodista Valeria Marcial, reportera del medio pozarricense de comunicación, Noreste (https://www.facebook.com/pg/noreste.net/videos/?ref=page_internal). En él se observa y escucha a la trabajadora del medio citado preguntar a los actuales diputados locales, integrantes de la LXIV Legislatura sobre cuántos artículos, así como capítulos tiene la vigente Constitución Política del estado Libre y Soberano de Veracruz de Ignacio de la Llave. Este simple ejercicio, que solo pudo ser aplicado a un universo de 25 legisladores (de 50 existentes) evidenció lo inaudito.

En el entendido de que es casi un compromiso ético, que no una obligación, la respuesta fue atinada por 21 de veinticinco legisladores locales y cuatro de ellos no acertaron en lo más mínimo. Por decencia no es posible citar literalmente a más de los 1900 comentarios que ha desatado el video en quienes han tenido la oportunidad de verlo. Baste con decir que todos coinciden en que mucho de lo que sucede es porque los parlamentarios veracruzanos no saben, no conocen y no se preocupan por saber a profundidad lo que podría decirse es su “herramienta” fundamental para desempeñar decentemente su trabajo como representantes populares, es decir saber todo lo posible y deseable sobra nuestra carta magna que rige en Veracruz.

La ignorancia legislativa y juvenil

En ese mismo sentido, circula igualmente un video de reciente creación (https://youtu.be/VtwhAkBOxCw), para ser más precisos, el pasado jueves (28/09/2017) el cual llevaba más de 8 millones de reproducciones, 36 mil comentarios y 220 veces compartido. El video creado por un grupo musical denominado ADN, se puede ver a un joven entrevistando a varios adolescentes, con perfil de estudiantes de secundaria a los cuales les haden dos preguntas base: el nombre de dos cantantes de reggaetón y quién es presidente de los estados unidos mexicanos, en qué continente está ubicado México, algunas capitales de países, cuántos estados tiene la república mexicana, ente otros. Con la espontaneidad propia de un adolescente, muchos responden correctamente y dan sin titubear los nombres de cantantes más famosos del momento de este tipo de música y yerran cómicamente en todas las preguntas sobre geografía e historia.

En una pronta reflexión, podemos ver que en ambos temas con distintas profundidades impera la ignorancia sobre lo que son aspectos básicos de educación cívica. Con la salvedad de que los jóvenes, si bien no es correcto que no sepan aspectos básicos sobre temas que seguramente tiene que ver en su educación secundaria su ignorancia no es más perjudicial, en todo caso, más que para ellos mismos en un futuro. En síntesis, no es el mismo daño que hace el que un legislador ignore y por tanto en algún momento violente flagrantemente, por ejemplo, lo que dicta la carta magna de los veracruzanos, con la posibilidad latente de lesionar los derechos de más de 8 millones que aquí vivimos frente a unos jóvenes que por su ingenuidad y candidez se les perdone su divertida ignorancia.

Los problemas de la educación

Siempre, en cada discurso vemos como autoridades de los distintos niveles de gobierno, aseguran que la mejor inversión es la educación. Como paréntesis, decimos, vaya paradoja con los actuales legisladores veracruzanos. Retomando, al parecer todos los políticos que la anterior frase, quizá se refieren a la infraestructura y no a los conocimientos. Baste leer un artículo escrito por Alberto Nájar // BBC Mundo (@BBC mundo) (07/06/2017 quien destaca los cuatro principales problemas que a su juicio guarda la educación en México: falta de mantenimiento, dinero insuficiente, disidencia sindical y el modelo educativo antiguo que afecta a la población más vulnerable. Como podemos ver, ninguno atañe a la falta de interés, desidia o preocupación por aprender lo que por ley les corresponde, en el caso de los servidores públicos o representantes populares. Eso es responsabilidad de cada uno. A muchos políticos, que tiene en sus manos grandes responsabilidades y de cuyas acciones dependen los destinos de un municipio, estado o un país, estar al día, bien preparados, con amplios conocimientos de lo que harán o dirán en pro de sus gobernados, no debería ser un asunto de crecimiento político o del poder, sino de absoluta responsabilidad cívica y ética. Bien citan muchos especialistas que la ignorancia política es más costosa que la ignorancia en los mercados financieros, pues el daño social es inmensamente abismal entre un asunto y el otro. De eso no hay ni la menor duda.