Brenda Caballero
Números Rojos
“Toda persona tiene derecho a la protección de la salud”.
Así lo dice el artículo Cuarto de nuestra Constitución Política. Pero ¿De verdad todos los mexicanos gozamos de ese derecho?
En teoría pareciera que sí, pues el Seguro Popular funciona desde el 2004 y financia servicios de salud a personas que no tienen empleo, trabajan por cuenta propia o que no son derechohabientes de ninguna institución de seguridad social, como IMSS, Issste, Pemex, Sedena o Semar.
Sin embargo, en la práctica no es así, ya que según estadísticas, en lugar de incrementarse, los afiliados al Seguro Popular durante el periodo 2013 al 2017 se redujo. Es decir, faltaron 14 millones de mexicanos (por desgracia, la población más vulnerable) para poder decir que realmente había una cobertura universal de salud en México.
En Veracruz se estimaban 4 millones de afiliados aproximadamente.
Ayer por la mañana, el presidente Andrés Manuel López Obrador anunciaba en su conferencia de prensa matutina que el Seguro Popular desaparecería pues nunca sirvió, aunque dijo que sería de manera paulatina, hasta que entre en vigor el Sistema de Salud Pública que garantice una atención de calidad con medicamentos gratuitos.
Dentro del esquema incluye la federalización del servicio de salud en ocho estados considerados con rezago histórico, entre ellos Veracruz además de Oaxaca, Chiapas, Guerrero, Campeche, Tabasco, Quintana Roo y Yucatán. Posteriormente, cada 6 meses se irán incorporando 8 estados más, para que en 2 años ya se tenga el Sistema de Salud Pública.
El IMSS será el responsable de los servicios de salud. ¿Tiene la capacidad para poder hacerlo? Porque por el momento no tiene capacidad ni siquiera para la atención de sus derechohabientes.
Recordemos que durante el sexenio de Javier Duarte saquearon la Secretaría de Salud con el esquema de empresas fantasma y corrupción, incluso viene a mi mente las falsas quimioterapias y los medicamentos caducos. Así que sería bueno ver cómo funciona la federalización de los servicios de salud en Veracruz, podría ser una buena medida para evitar atracos como el que ocurrió en ese gobierno.
Definitivamente el proyecto del Presidente López Obrador sobre la cobertura universal de salud suena bastante positivo, pues por primera vez los más vulnerables podrán ejercer ese derecho, sin embargo no olvidemos que el IMSS no tiene la capacidad para absorber totalmente el seguro popular, a menos que desde la Presidencia se le dé mucho más que primeros auxilios.
Ahora bien, el Presidente aseguró que se tendrá acceso a todos los medicamentos sin importar el costo, no solamente los básicos a los que estamos acostumbrados por lo que se recurrirá a la ONU para transparentar la compra, pero que si no se logra, se abrirán las licitaciones a compañías internacionales para la compra de los mismos.
Pero siendo tan celosas las farmacéuticas ¿Proporcionarán los laboratorios sus patentes? Acaso les darán algún incentivo o subsidio para entrarle a la propuesta de medicamentos gratuitos?
Sin duda, esta cirugía mayor al sistema de Salud por parte del Presidente puede tener una recuperación muy lenta.
caballero_brenda@hotmail.com
@NumerosRojos_BC
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