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    Oscar Coria Reyes
    En Contraste

    Tras un proceso lleno de situaciones raras, acusaciones, señalamientos de fraude por compra de votos y relleno de urnas, y, tras resolver los electorales la repetición de un proceso interno que desde inicio se vio contaminado por toda una campaña negra auspiciada por los dos candidatos a la dirigencia estatal; este 8 de septiembre la renovación de la dirigencia será un parte aguas para el panismo en Veracruz.

    Pepe Mancha y Joaquín Guzmán, de nueva cuenta, están encabezando las planillas contendientes en este nuevo proceso interno del blanquiazul, en donde desde el anuncio de que se repetía la elección, tanto uno como el otro, salieron a descalificarse. Por un lado, Pepe Mancha señalando la intromisión del Gobierno de Cuitláhuac García Jiménez, a quien acusa y señala de financiar la campaña de Joaquín Guzmán; lo cual no sería raro, ya que no sería la primera vez que algún gobierno en turno financie campaña de otros partidos, como en su momento lo hiciera Fidel Herrera, Javier Duarte y mencionan algunas voces que de igual manera lo hizo Miguel Ángel Yunes.

    Practica recurrente para garantizar los “acuerdos” que se pudieran tomar, sobre todo dentro del Congreso Local, en donde, como muchos recordaran, los diputados van de acuerdo a donde los lleve la corriente, es decir la dirigencia de su partido, que, al ser financiada por el gobierno en turno, esto garantiza el sometimiento político al servicio del que esta.

    Por otro lado, las huestes de “El Chapo” Guzmán, señalan los cientos de negocios por millones de pesos que viene realizando Pepe Mancha con prestanombres, negocios que van desde la adjudicación directa de obra, convenios publicitarios a través de medios digitales a nombre de su familia, recomendaciones de personas afines para ocupar puestos de dirección en ayuntamientos en donde  Mancha apoyo al actual presidente (a) para que fueran candidatos, así como, el manejo discrecional de los recursos del partido a conveniencia durante su gestión al frente del mismo.

    Con todo esto, los dos candidatos, buscan convencer a un panista incrédulo, un panista que ha perdido el interés y la confianza en quienes los buscan dirigir, un panista que abiertamente manifiesta su interés por recibir un beneficio ya no una promesa, un panista cansado de ver que los mismos de siempre están compitiendo de nueva cuenta, con la única novedad de que “los mismos” se dividieron, en dos grupos, en virtud del que el “negocio” de la política ya no alcanza para todos.

    Este 8 de septiembre el panismo veracruzano debería de estar frente a la oportunidad de una renovación ideológica, frente a la opción de un cambio en las políticas internas de selección de candidatos, frente a la certeza de la integración de nuevos cuadros, pero No, el panista en esta nueva elección, tendrá enfrente la decisión de solo determinar cuál grupo político se posiciona y fortalece de frente a los nuevos procesos electorales, en donde, no se ven tiempos de cambio, renovación y mucho menos democracia al interior del PAN. Tristemente el PAN en Veracruz ha perdido el rumbo, la mística y toda esa historia humanista que lo había caracterizado.

    DESECHAN JUICIO POLITICO CONTRA LA ALCALDESA DE CÓRDOBA. – Tras una reunión de las Comisiones permanentes de Gobernación y de Justicia y Puntos Constitucionales, los diputados integrantes determinaron como improcedente e juicio político promovido en contra de la alcaldesa de Córdoba, Leticia López Landero, el cual fue promovido por el abogado Pablo Martínez Rodríguez, para lo cual emitieron y firmaron el dictamen correspondiente.

    Con esto, se echa abajo la ola de especulaciones que señalaban el posible enjuiciamiento de la alcaldesa cordobesa por supuestos desvíos de recursos, nepotismo y otros argumentos que no se pudieron tipificar como constitutivos de un delito o acción que ameritara tal juicio político.

    Desde inicio, la presentación de esta “supuesta” denuncia, carecía de un sustento sólido y legal que motivara a tal situación, sin embargo, las “benditas redes sociales” se encargaron de maximizar el tema, con un linchamiento mediático, que tan solo quedo en eso y no procedió.

    Sin embargo, este antecedente debe quedar como un llamado de atención no solo para la alcaldesa de Córdoba, sino para todos los alcaldes de la entidad veracruzana, de que cada día, hay más ciudadanos inmersos e interesados en lo que una administración municipal realiza, para obligarse a ser mejores y no gobernar por contentillo, capricho y mucho menos para solo beneficiar a los amigos.

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