Cuic-Winckler, ¿Quién gana?

Salvador Muñoz

Los Políticos

Es una pena que “tuvieron” que morir 30 personas y López Obrador hiciera el ridículo nacional citando “otros datos”, para que sólo así, se reunieran el Fiscal General del Estado y el Gobernador… pero esto es sólo un paso… ojalá que tras la reunión hubiera “unión” en pro de los veracruzanos, pero se insiste… al menos ya se dio un paso.

No era para menos… en términos generales, uno puede ver un conflicto entre cárteles que se quieren apoderar de plazas, casos de extorsión, ejecutados y hasta actos de índole terrorista, pero al interior, hay algo más: el reto del crimen organizado al Estado.

Cuando refiero al Estado, no sólo implico al Gobierno estatal, sino también se involucran a los otros poderes y de refilón a la misma Fiscalía.

Ejemplo: el caso de una mujer decapitada por un cártel para declarar la guerra a otro cártel. ¡Señores! ¡Somos la entidad con el mayor número de feminicidios y los delincuentes “usan” a una mujer como advertencia!

Otro ejemplo: Los varios siniestros en diversos establecimientos en la zona de Coatzacoalcos. Si ya eran consecutivos, si ya estaba establecido un modus operandi por parte de los delincuentes, ¿por qué no se implementó, primero, una reunión con las cámaras de comercio; o por qué no se conminó a los propietarios a acercarse tanto a SSP o FGE para exponer su situación en aras de resguardar no sólo su vida, sino sus bienes inmuebles? Y luego, después de ello, un operativo de vigilancia. Los delincuentes, llámenles “Locas” o como gusten, actuaron con total impunidad, sin miedo a ser detenidos o molestados por alguna autoridad.

Lo peor es el caso del adolescente detenido, juzgado y condenado a amputarle las manos por un grupo armado que asume el rol de nuestras autoridades antes citadas: Hace función de policía, de fiscal y de juez, y a la vez, hace a un lado a las instituciones. ¿Quiere leer algo macabro? Los comentarios en torno a la amputación de las manos al adolescente: hubo gente que lo celebró.

Hace unos días se lo decía al lector: ¡Hable con sus vecinos! ¡Óigalos! ¡Hay mucha molestia en sus comentarios! Hay enojo, frustración, ira, pero no expuesta… ahí está latente y se refleja en algunos casos, como en la celebración de un ladrón linchado y en este caso, “ajusticiado” por otros delincuentes que se creen con superioridad moral para hacerlo… pero esto no es  nuevo… lo hemos visto en mantas, carteles, ejecuciones donde advierten a sus contrincantes que “esto les va a pasar a todos esos que roban, secuestran, violan, matan, etcétera”.

Y sí, uno al principio pensaba que esa tarea de “aseo social”, o como lo cita el mismo Gobernador, “limpieza social”, mientras la ejecutaran entre ellos, no había problema, aunque creo que no alcanzamos a ver que al “autorizar” moralmente estos actos, los normalizamos y lo peor, es que vamos perdiendo el respeto a las instituciones que van desde Gobierno del Estado con sus policías, pasando por la Fiscalía, hasta llegar al Poder Judicial… ahora agregue que nuestras instituciones “se agarran del chongo” en una versión bizarra de “Burundanga”, donde Zongo le dió a Borondongo / Borondongo le dio a Bernabé / Bernabé le pegó a Muchilanga le echó a Burundanga / Les hinchan los pies… en un momento dado se puede entender la falta de fe, confianza, credibilidad en nuestro Gobernador, en nuestro Fiscal, en nuestros Jueces y Magistrados, pero eso no les da autoridad a éstos a que por sus intereses partidistas, de colores o apellidos, pongan en medio a cada veracruzano, porque al permitir eso, las consecuencias están a la vista: otros han de tomar el control por encima de un Gobernador, de un Fiscal, de un Juez… y se podrían apoderar del Estado.

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