Enrique Yasser Pompeyo
Mesa de Redacción
El caso del adolescente herido por un arma de fuego en el Instituto Educativo Xalapeño no debe considerarse un asunto menor.
Si bien, como indica en un comunicado dicho colegio, el joven sólo resultó lesionado en el dedo pulgar de la mano izquierda, otra cosa sería que el caso hubiera terminado en una tragedia.
En el mismo comunicado se informa que el arma de fuego en forma de pluma, calibre 22, que el responsable «accidentalmente accionó» fue un obsequio del papá.
El hecho debe tomarse como una llamada urgente de alerta.
Más allá de si las instituciones educativas están impedidas para revisar las mochilas de los estudiantes para privilegiar los derechos de los menores a su intimidad, se encuentra la responsabilidad de los padres de familia.
Pero también es responsabilidad de todas las autoridades, principalmente de la Secretaría de Educación.
El Operativo Mochila funcionó muy bien, pues se evitaba precisamente que los menores introdujeran objetos o armas que pudieran lesionar no sólo a los alumnos, sino también a los docentes y personal administrativo.
Autoridades y padres de familia deben tomar cartas en el asunto para evitar que en otra escuela se vuelva a registrar un hecho similar.
No se debe esperar a que haya alguna persona muerta para atender la seguridad y salvaguardar la vida de todos.
enriquepompeyo@hotmail.com
Hacer Comentario
Haz login para poder hacer un comentario